Sumario

Diputados violentos

Nota de la redacción: Este artículo fue escrito un día antes de la toma de protesta presidencial

No sé qué habrá pasado ayer, si Felipe Calderón fue a rendir su protesta como presidente de la República en la tribuna del Congreso o no. En la Redacción del periódico donde trabajo sobraban los que querían hacer alguna apuesta, pero todos querían apostar a que sí, a que sería en la tribuna del Congreso y a que se armarían los mameyazos, la única duda era entre quiénes, si entre los diputados y senadores panistas y perredistas, entre los elementos del Estado Mayor Presidencial y los legisladores del Sol Azteca, o todos contra todos; y como el pronóstico en este sentido se veía confuso y acerca de lo demás todos estaban de acuerdo, pues finalmente nadie apostó nada, pero la ocasión era propicia para ganarse una feria.

Lo que todos conocimos ya casi al iniciar la semana, fue el espectáculo que dieron el martes los diputados y que le dio la vuelta al mundo para vergüenza de México. Era de esperarse, o por lo menos ya lo esperaba yo pues en alguna ocasión dijimos aquí que el gran riesgo para la paz social sería un resultado electoral muy cerrado entre el PAN y el PRD, porque sabíamos y así lo dijimos, que los panistas son tan violentos como los perredistas, extremistas unos y otros, ninguno aceptaría la victoria del otro si no era contundente ésta.

Con los priistas -dijimos en aquella ocasión- no habría problema, porque éstos no están acostumbrados a la movilización, lo suyo es el mitin de apoyo y el aplauso, las matracas y las tortas y refrescos, pero no son de pelea, se disciplinan. A los panistas en cambio los he visto desde hace años realizar marchas de protesta y tomas de oficinas y palacios de gobierno, su discurso es violento y su acción no lo es menos cuando de defender algún triunfo se trata, son tan radicales como los perredistas de la extrema izquierda antidemocrática, cuyas tribus no tienen nada qué perder y sí en cambio mucho qué ganar si llegan al poder; y los blanquiazules en estos momentos sí tienen mucho qué perder, si defendían antes un triunfo electoral municipal con palos y piedras como los APPOs, cuanto y más ahora que se trata de la Presidencia de la República. Por eso esperaba yo el enfrentamiento que se dio el martes en San Lázaro y que muy probablemente se repitió ayer, no lo sé porque tuve que escribir esto desde el jueves.

Pero usted vio las escenas. La diputada panista Violeta del Pilar Lagunes Viveros, "Violenta Lagunes" le llamó un diputado perredista, fue la legisladora que agredió con latas de refresco y botellas de agua al perredista Víctor Varela, quien intentaba subir a la tribuna del recinto legislativo.

Este su semanario 7 días realizó un sondeo de opinión para preguntarle a la gente cómo calificaría la actuación de los diputados peleándose en la Cámara por la Tribuna, y lo menos que les llamaron fue "animales" y "bestias", porque eso parecían -dijeron algunas de las personas interrogadas- animales en un corral y no diputados en su recinto legislativo, aunque no faltó alguien benevolente que simplemente dijo que en su opinión el comportamiento de los diputados se debe a que no tienen educación, que el PRD "agarra a cualquiera -dijo- como candidato, aunque sea a un albañil sin ninguna preparación", y que en el PAN tampoco cantan mal las rancheras, que sus diputados son gente sin preparación.

Pero no. Violeta Lagunes Viveros, de 35 años de edad y diputada por el Distrito 9 de Puebla, es de profesión abogada y su escolaridad llega hasta el grado de Maestría, milita en el PAN desde hace 12 años y es miembro del Comité Directivo Estatal en Puebla desde hace dos años. Fue candidata de su partido a sindica municipal del Ayuntamiento de Puebla en el 2004; secretaria proyectista en el Tercer Tribunal Colegiado en materia civil del Sexto Circuito de Puebla desde 1998 hasta el 2006; asesora jurídica de la Sala de Regidores del ayuntamiento de Puebla de 1996 a1998; y coordinadora de Reglamentos en el ayuntamiento de Puebla en 1995.

"Violenta" Lagunes ha sido catedrática honoraria en la Universidad Popular Autónoma de Puebla; miembro de la Asociación de Ex alumnos de la Escuela Libre de Derecho de Puebla; del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial, Sección 27; de la Sociedad de Abogadas de Puebla; y del cuerpo de Protección Civil del Poder Judicial de la Federación. No es una persona sin preparación académica ni mucho menos, sin embargo el martes le arrojaba al diputado Varela cuanto objeto encontró en la mesa, principalmente latas de refresco y botellas de agua, mientras él caía al suelo entre empujones.

Se veía en la foto bravísima, inclinada mientras agredía al perredista, por lo que mostraba parte de sus tetas gracias al escote de su vestido negro de encaje que usaba ese día, parecía aquello un pleito de burdel (de cierta categoría) y no una sesión de la "honorable" Cámara de Diputados del "honorable" Congreso de la Unión. Y si tal era la actitud de una dama con tales antecedentes académicos, imagínese la de sus compañeros machos que querían verse más machos rompiéndoles la madre a los violentos de la izquierda que querían tomar la tribuna. "La toman ¡madres!, nos adelantamos y la tomamos nosotros y pónganle como quieran weyes."

De que debió rendir su protesta Felipe Calderón no hay duda, lo de menos era que llegara a San Lázaro rodeando de cientos o miles de elementos del Estado Mayor Presidencial y de la Policía Federal Preventiva, y que estos entraran rompiendo madres para abrirle paso hasta la tribuna, que es lo que saben hacer, para eso están entrenados.

El presidente de la mesa directiva, Jorge Zermeño dijo que de ser necesario, "si las circunstancias así lo demandan, se usará el resguardo de la fuerza pública conforme lo estipula el reglamento de la Cámara baja, entre lo que se contempla la participación de miembros de la seguridad de este recinto, así como de elementos de la Policía Federal Preventiva y el Estado Mayor Presidencial.

Y por la otra parte el diputado perredista Raymundo Cárdenas advirtió que en caso de cambio de sede del Congreso, su bancada se trasladaría al lugar escogido para impedir la toma de posesión del presidente electo Felipe calderón, aunque descartó este diputado que la fuerza pública entrara al Congreso en las siguientes horas para garantizar la ceremonia de toma de posesión, "en caso de que la Mesa Directiva lo pida -dijo- sería un hecho inadmisible y trágico para México". (¿Para México o para ellos?)

Y Leonel Cota, presidente nacional del PRD, advirtió el miércoles que el día primero de diciembre unas 100 mil personas se manifestarían en las calles de la ciudad de México contra la toma de protesta a Felipe Calderón como Presidente de la República. Dijo que este organismo político tendría "un comportamiento fuerte", y estableció que "bajo ninguna circunstancia" el PRD colaboraría con la instalación del próximo gobierno federal, y que evitaría "a toda costa" que el panista tome las riendas del país.

O sea que estaba previsto que hubiera bronca adentro y afuera, en el recinto legislativo y en la calle. No sé si va a hubo muertos o sólo heridos y detenidos, pero se iban a enfrentar con todo porque es la última carta de Andrés Manuel López Obrador. Después de ayer -y desde ayer- Felipe Calderón es el presidente de la República y Francisco Ramírez Acuña -con fama de duro- su secretario de Gobernación, ya no habrá mucho qué hacer.

Pero ¿cómo queda el país...? Esto es lo grave del asunto, la polarización será mayor e iniciar un gobierno así es el peor de los escenarios. La represión sólo conseguirá exacerbar aún más los ánimos, pero por otra parte necesita el gobierno dar una demostración de fuerza para que no le tomen la medida. En resumen, si utiliza la fuerza y reprime, malo, y si no lo hace, también. Pobre Calderón... no me gustaría estar en sus zapatos.