Tranquilo Ramírez Acuña

+ Se aleja temporalmente

Guadalajara (Milenio).- Por un buen momento, Francisco Ramírez Acuña se alejará de la política local. Su despido como secretario de Gobernación, cantado desde meses, confirmado el pasado viernes y ejecutado el miércoles por la mañana, no significa un regreso inmediato a la arena política de Jalisco. Así lo confió una fuente panista enterada de los entretelones de la grilla palaciega de Los Pinos y de las razones por las que decidieron segar la cabeza a Ramírez Acuña.

La remoción del ex gobernador de Jalisco ha generado dos tipos de preguntas: una, por qué Felipe Calderón pidió su renuncia; y dos, qué consecuencias tendrá en la política local. Sobre la primera pregunta se ha respondido diciendo que Ramírez Acuña cumplió un perfil adecuado para el arranque del gobierno de Felipe Calderón, pero ya no es el adecuado para la fase que sigue.

Era un perfil de mano dura para enfrentar los resabios del movimiento lopezobradorista, de Oaxaca y otros conflictos sociales. Pero no era el adecuado para operar la interlocución con los partidos, especialmente en la negociación de la reforma electoral. En el primer círculo de Calderón quedó la impresión de que la reforma política salió al gusto del PRI y del PRD y que la falta de operación de Ramírez Acuña impidió que el PAN tuviera al Poder Ejecutivo federal como aliado natural en esta contienda.

Lo más claro hasta ahora es que el ex titular de Gobernación regresará a Guadalajara, donde radica su familia, y se tomará unas vacaciones.

Más allá de las vacaciones, Ramírez Acuña también se distanciará temporalmente de la política local. Según un dirigente panista consultado, el ex secretario de Gobernación no se meterá en las decisiones del PAN. “En un buen rato no participará en los asuntos locales”, expresó.

El alejamiento temporal de la actividad política local cobra sentido, si se tiene en cuenta que este año habrá renovación de la dirigencia estatal del PAN. En marzo o abril se elegirá a los integrantes del nuevo consejo estatal, quienes a su vez elegirán jefe estatal en mayo o junio.

Aunque fuera de Gobernación, Ramírez Acuña sigue teniendo un peso político en Jalisco, el cual busca ser inclinado a favor de una u otra corriente. Como se sabe, al salir de la gubernatura Ramírez Acuña era jefe político del grupo en el que militan Eduardo Rosales, presidente del PAN Jalisco, y Jorge Salinas, jefe de la fracción de diputados locales. Una corriente enfrentada con la del gobernador Emilio González.

La configuración de las corrientes en el PAN Jalisco se modificó en estos trece meses. Distintas fuentes confirman que hubo un distanciamiento entre el ex gobernador y Eduardo Rosales.
Al mismo tiempo, Emilio González cortejó con paciencia de monje budista al titular de Gobernación. Cada ida a la ciudad de México buscaba entrevistarse con él y le pedía consejo.

Ayer, al opinar sobre la salida de Ramírez Acuña, Emilio González dijo que ningún jalisciense bien nacido debería festejarlo y declaró que él seguirá pidiendo el consejo del político nacido en Jamay. Más allá de si esa postura es auténtica, lo cierto es que surtió efecto.

Panistas de las dos corrientes aceptan que Ramírez Acuña logró distanciarse de lo que era su grupo original y que incluso escuchó la posibilidad de apoyar al candidato a la presidencia respaldado por Emilio González y eventualmente por Alberto Cárdenas Jiménez. Un dirigente del comité estatal admitió que la versión no era del todo falsa.

Ante este escenario, Eduardo Rosales ha intentado hacer su esfuerzo para volver a estar en el primer círculo de los afectos del ex gobernador. La noche del martes habló con Ramírez Acuña para lamentar su despido de Gobernación. Fue una llamada de apenas 40 segundos.

De otro lado, el equipo de Calderón (Mouriño, César Nava y Germán Martínez) hizo saber a Eduardo Rosales, Jorge Salinas y Abraham González que no es una ruptura con este grupo político. Habrá una interlocución directa, dijo un miembro de la dirigencia estatal.


Madrileño dirigirá lucha contra
crimen en México, dice El País

+ Mouriño nació en España en 1971

Ciudad de México, 17 de enero (El Universal).- El diario español El País destacó en su primera plana de hoy el nombramiento de Juan Camilo Mouriño Terrazo como secretario de Gobernación en México.

Bajo el título de "un economista madrileño dirigirá la lucha contra el crimen en México", el diario señala que Mouriño Terrazo como jefe de la Oficina de la Presidencia ha sido el verdadero poder en la sombra en los primeros 13 meses de gobierno de Felipe Calderón.

"Desde un cargo que fue creado el 4 de diciembre de 2006, ha combinado las funciones de jefe de Gabinete con las de operador político con partidos, gobernadores, portavoces parlamentarios, sindicatos, organizaciones sociales, empresarios e iglesias", destaca.

El texto señala que su padre, el empresario Carlos Mouriño Atanes, es el presidente y propietario del Celta de Vigo desde que se hizo con el mayor paquete accionario del club de fútbol gallego por cuatro millones de euros.

El diario hace una semblanza de Mouriño y su paso por la política de nuestro país, desde que fue diputado local del PAN por Campeche, candidato a la alcaldía de la capital del estado y diputado federal, hasta su cercanía con el presidente Felipe Calderón.

El País señala que la incorporación de Mouriño a Gobernación restituye poder a una secretaría que, tradicionalmente en México, "es la más poderosa y tiene una línea más directa con el presidente", y describe que entre sus atribuciones destacan los asuntos de seguridad nacional y las negociaciones políticas con el Congreso.

El nuevo secretario de Gobernación nació en Madrid el 1 de agosto de 1971 y adquirió la nacionalidad mexicana al cumplir los 18 años.

El artículo 91 de la Constitución Mexicana establece que para ser secretario se requiere ser mexicano por nacimiento. Una reforma constitucional del 20 de marzo de 1997 permite obtener la nacionalidad por nacimiento cuando uno o los dos padres la obtienen con anterioridad.

Del entusiasmo a las quejas

JUAN SÁNCHEZ ALDANA, alcalde de Zapopan.- Jalisco pierde con la salida de Francisco Ramírez Acuña, opinó el alcalde, quien consideró que el relevo fue “sorpresivo” por el desempeño “favorable” y su “digno papel”. “Nos duele que un funcionario que fue gobernador sufra este descalabro […] No conozco un motivo para su salida”

RAÚL PADILLA LÓPEZ, ex rector de la U.deG.- Ramírez Acuña es un buen activo para el país y que deje la Secretaría de Gobernación no debe dar satisfacción a nadie, opinó el ex rector. Padilla López aplaudió la gestión del ex gobernador y dijo que la presencia de otros jaliscienses en el gabinete presidencial es motivo de orgullo

GABINO BERUMEN CERVANTES, presidente estatal del PRD.- “Ya se veía venir, porque fue muy desafortunada su participación en la Segob”. El presidente del PRD recordó que los partidos nacionales no lo reconocían como interlocutor, así como “la mordaza que le puso a Ruth Zavaleta (presidenta de la Cámara de Diputados) en el informe de Calderón”

MIGUEL ÁNGEL MARTÍNEZ, secretario de Educación de Jalisco.-
“Los jaliscienses perdemos un espacio de interlocución privilegiado con el gobierno federal”, opinó el funcionario jalisciense. Rechazó que el cambio en la Secretaría de Gobernación sea un fracaso para Ramírez Acuña, cuya gestión, definió, fue discreta pero sólida.