Los gobernantes bola de cobrones



Hágase la voluntad de Dios (pero) en los bueyes de mi compadre. Le platico: Hace unos días propuso una diputada que renuncien los legisladores locales (donde vivo) al 30 por ciento de su salario para ayudar a los damnificados por las inundaciones. Sí pero a partir de enero del 2009, cuando ya no sea Ella diputada, porque para entonces habrá dejado la representación de su distrito en el Congreso del Estado para buscar representarlo en San Lázaro. Supongo que allá también, si es candidata y gana la elección, propondrá igual que a todos los diputados federales se les reduzca el salario ja ja.

No sé si se le ocurrió a Ella (no creo) o alguien le sugirió (sí creo) hacer esta propuesta que ya presentó oficialmente en la Legistura, pero en cualquier caso me pareció que fue una vacilada. Sin embargo qué mejor oportunidad para que los ciudadanos le agarren la palabra y exijan que ganen menos, no sólo los diputados, sino el gobierno todo, porque -con sus excepciones- hacen poco menos que nada, especialmente los diputados.

Hay muchas necesidades, muchos problemas que resolver y algunos se podrían solucionar con parte del dinero que cobran pero no devengan algunos -muchos- funcionarios que lo único que hacen es eso, cobrar.

Por eso la idea de Carolina (que así se llama la diputada aunque algunos le dicen Calorina) gustó tanto a la población y tan poco a los bueyes de su compadre, que de inmediato pusieron el grito en el cielo. Sus compañeros priístas dijeron al principio que sí porque no podían decir otra cosa, pero cuando formalizó su propuesta de inmediato aparecieron los peros.

Los panistas desde un principio condicionaron su aprobación; y los del PRD y Convergencia de plano dijeron que les parecía una mamada (con otras palabras que a final de cuentas significan lo mismo). Claro, si no necesitan pretextos para oponerse a todo porque consideran que esa es su función, cuanto y más para desechar sin discutirla siquiera una medida que afecte a su bolsillo. Tanto tiempo luchando porque les hiciera justicia la revolución, para que cuando por fin llegó la teta, perdón, la dieta, aparezca una diputadita proponiendo que les paguen menos...

Pero ahora se joden, porque la iniciativa tuvo eco de inmediato en un ayuntamiento, cuya cabeza no necesita mucho del sueldo y además tiene qué hacer méritos ante los gobernados por lo que se pudiera ofrecer en un futuro no lejano. El alcalde hizo suya la idea y la va a proponer en el cabildo, donde no es muy probable que se apruebe el monto del descuento sugerido, pero con que se caigan cadáveres con una pizcacha de su sueldo ya es (será) ganancia para una causa noble como ésta de apoyar a tanta gente que lo perdió todo con las inundaciones.

Y si la idea prende, no les va a quedar otra a otros más que entrarle con su cuerno. No faltará por ahí otro ayuntamiento que no se quiera quedar atrás y secunde este acuerdo y tome una decisión en el mismo sentido.

Y ya con estos ejemplos me parece que será todo el gobierno del Estado el que haga lo mismo, aunque sea por vergüenza la mayoría de los funcionarios. Lo propondrá en cada dependencia alguno que no necesite mucho del sueldo, y a los demás no les quedará más que pronunciar una frase que vi impresa en la parte trasera de los calzoncitos de una joven que estaba en un calendario en un taller mecánico: "Despacito papi".

Y al final serán los diputados los que acepten dar una mochada de su sueldo, que no será obviamente del 30 por ciento, ni locos, pero sí algodón para curar la herida. Los que sí de plano creo que no van a dar ni maiz paloma son los jueces y magistrados, porque ya dijo el pastor del rebaño que tan horrorosa medida sería anticonstitucional. Pero por supuesto... lo único constitucional, anterior a todas las constituciones, es la parte del Padre Nuestro que dice "venga a nos tu reino", y si acaso otro pedacito, pero con su respectiva jurisprudencia: "hágase Señor tu voluntad... pero en los bueyes de mi compadre." O sea, sáquense a la chingada con su descuento.

De llegarse a aprobar esta medida se podrían reunir fácil unos 10 millones de pesos mensualmente con los descuentos a los salarios de todos los altos funcionarios del gobierno del Estado y a los diputados. Y aunque no sea del 30%, que sea menos, que sea el 20 por ciento; y ya muy jodido que les descuenten por lo menos el 15% de lo que ganan, como quiera 5 millones de pesos al mes sería una buena cantidad para apoyar a quienes urgidos están de la ayuda.

El problema es ¿a dónde va a ir a dar ese dinero?, ¿quién lo va a manejar y cómo?, tiene que haber transparencia, pero creo que sí se puede. No será fácil, porque el gobierno tendría que dar a conocer cuánto gana cada quién, el monto del descuento en cada caso, la cantidad a la que ascendería el total de estos, y demostrar cada mes que se hizo el depósito correspondiente al fideicomiso o fondo que se crearía para tal fin, el cual tendría que ser dirigido y administrado por personas de probada rectitud. Mmmmm... ahí es donde la cosa se pone más negra que la noche en que se perdió la cochina. Pero si hay voluntad y pidiéndole prestada su lámpara a Diógenes, se puede encontrar quien administre esa manteca.

Si no era una broma y la cosa va en serio, ahora es cuando chile verde le has de dar sabor al caldo, que le agarren la palabra a la diputada Carolina Gudiño. Pero como dijo la madre superiora del convento cuando llegaron los bandidos diciendo que iban a violar a todas las monjas, "a la madre superiora no por favor -suplicó una de ellas-, a ella no, no sean crueles, a ella no". "Hermana... -protestó la madre superiora- dijeron que ¡a todas!"

Empezando por la misma diputada que hizo la propuesta, nada de que ya se va, nada de que ahí se ven, que se comprometa a enviar a ese fondo el 30 por ciento de su salario como diputada federal cuando lo sea, pero que no sólo se los prometa, porque como dijo una amiga: "Está bien que me lo prometas, mientras no me lo metas, porque una vez metido, ch... a su m... lo prometido". Tendrá mucho valor su palabra, pero que firme un papel. Confía en Alá pero amarra tu camello.

¿Sabe usted cuánto ganan los diputados y los altos funcionarios del gobierno de Jalisco?, mejor ni le digo porque le va a entrar la calorina...

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