Lo que nos faltaba. ¿Qué tal un conflicto internacional de nuestro país con otro, o con otros (con varios sería mejor por si no le atora alguno) para seguir manteniendo ocupada la atención de la gente en algo que no sea la crisis económica, la falta de empleos, el aumento en los precios, etc.? Total, si ya nos sirvió el brote-epidemia-pandemia de influenza durante quince días, hay que seguirla aprovechando.
Aunque según el INEGI en 1985 murieron 28 mil 238 personas por enfermedades respiratorias en México; en 1990 fallecieron 23 mil 958; en 1995 fueron 21 mil 950; en el año 2000 ya fueron sólo 14 mil 244; y hace dos años, en el 2007 los decesos fueron 14 mil 575; y el saldo de esta epidemia no llega todavía ni a 50 muertos (comprobados, que haya sido por ese motivo), el pretexto fue bueno para casi paralizar al país y que la gente se olvidara de todo lo demás.
Pero ya no ha muerto gente por ese motivo en los últimos días y el número de casos -comprobados y sospechosos- disminuye. Ya no sirve la influenza como tal -como peligrosa enfermedad- para mantener ocupada la atención de los mexicanos, qué hacer... Bueno, como dijo el embajador de Argentina en México, Jorge Raúl Yoma: “Imbéciles hay en todos los países”, esto al referirse a las actitudes discriminatorias que han sufrido los mexicanos. ¡Eso lo podemos aprovechar!
Los más acelerados -entre los que menciona el embajador argentino- fueron los chinos, que la semana pasada pusieron en cuarentena (prácticamente los secuestraron) a más 70 mexicanos que no presentaban ningún síntoma de la enfermedad, mientras que Cuba, Ecuador, Perú y la propia Argentina decidieron suspender los vuelos desde y hacia nuestro país, e impidieron el regreso de mexicanos que allá se encontraban. Japón impuso restricciones a la importación de productos mexicanos.
Los más ojetes han sido los chinos ¡culelos!. Los mismos que escondieron durante meses el desarrollo del Síndrome Respiratorio Agudo Severo, más conocido como SARS.
Myrna Berlanga, una de las mexicanas secuestradas por el gobierno chino, terminó así su relato que hizo por internet del calvario que vivió en aquel país:
"...parte de su protocolo de prevención contra el virus incluye el trato humillante de sacarte frente a todos (los pasajeros) del avión sin siquiera revisarte, pararte en la puerta del avión mientras eres fotografiado y grabado en televisión local, encerrarte bajo llave varias horas en una unidad en la que el baño está adaptado como bodega de tiliches; no decirte o explicarte nada (por qué, cuánto tiempo, a dónde); ver que hasta las bolsas de basura que ponen en tu cuarto son “especiales”; que no te saben decir cuánto tiempo más estaremos aquí encerrados y qué seguirá. ¿Por qué no dejan a nuestro contacto de la embajada vernos?, ¿por qué de repente las líneas telefónicas a nuestras habitaciones no reciben llamadas del exterior?, ¿por qué si somos 10 los mexicanos en el hotel, no hay (siquiera) algún traductor que de perdida nos hable en inglés? Ya no sé si estoy enojada o el cansancio va ganando, lo único que queremos es salir. ¡No estamos enfermos, nadie tiene temperatura, tos, gripa, nada!"
Hasta este miércoles, tras varios días que llevaban los compatriotas en cautiverio, acusó México a China de poner en cuarentena a los mexicanos de manera arbitraria, diciendo que de los 71 mexicanos retenidos por China en hospitales y hoteles, ninguno tuvo síntomas de la influenza y la mayoría ni siquiera tuvo contacto con personas o lugares infectados. También mandó un avión de Aeroméxico para traerlos a la Ciudad de México.
Pero ahí no terminó todo, el show debe continuar. Ya protestó México en la ONU por las acciones de xenofobia “sin justificación científica”, que algunos países están aplicando contra ciudadanos mexicanos por la epidemia de influenza. En la sesión de la Asamblea General, convocada por México, el subsecretario de Asuntos Multilaterales y de Derechos Humanos, Juan Manuel Gómez Robledo llamó a detener los actos de discriminación, ya que “no podemos vivir en un mundo de percepciones que afectan incluso las relaciones entre los Estados”, dijo y agregó que se han atropellado los derechos humanos de los mexicanos. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, criticó las medidas “exageradas”, que sólo causan daños “en nuestras economías, sociedades y pueblos”.
No, esto no se va a quedar así, por lo menos se tiene que hinchar. Legisladores mexicanos que integran el Parlamento Latinoamericano (el Parlatino) convocarán a los congresos de los 22 países participantes del organismo a emitir una declaratoria contra los gobiernos que han discriminado y rechazado a personas, vuelos y productos nacionales. La Subcomisión de Asuntos Migratorios que preside el diputado mexicano José Edmundo Ramírez Martínez, informó que estableció comunicación con legisladores de Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Panamá y Argentina para expresar el malestar de México ante esa situación.
Recordó que Argentina, Cuba, Ecuador y Perú prohibieron vuelos provenientes de México, con lo que fijaron una postura de rechazar a turistas, empresarios y ciudadanos y productos mexicanos de forma unilateral y sin ningún fundamento científico. "Es lamentable -dijo- que en estos tiempos aún existan gobiernos que adopten prácticas discriminatorias que nos recuerdan los años del racismo y la intolerancia, más cuando se trata de naciones que a lo largo de la historia han sido consideradas hermanas de México",
Agregó que la subcomisión mencionada ya se comunicó vía telefónica con legisladores de Argentina y Perú para hacerles saber el malestar del pueblo de México por la actitud de sus gobiernos ante la epidemia de la influenza humana. "Y voy a enviar también al presidente del Parlamento Latinoamericano, Jorge Pizarro, una carta para expresarle la molestia por esas acciones y solicitarle que ese organismo permanente que agrupa a los congresos de 22 países de América Latina y El Caribe fije una postura al respecto".
¿Y si les declaramos la guerra? A Argentina ya no porque ya se disculpó y nos dio una explicación, dijo que la suspensión de vuelos no fue una actitud discriminatoria, sino una medida sanitaria porque su país no estaba preparado para una contingencia de ese tipo, y que además ellos viven una situación más grave que México en el tema del dengue”. A Chile tampoco, porque también ya se disculpó su gobierno porque algunos chilenos insultaron a los jugadores de las Chivas, ahora sólo falta que Héctor Reynoso se disculpe con los chilenos por patán. Pero nos quedan Cuba, Ecuador y Perú, por qué no les enseñamos buenos modales...
Y los chinos culelos, esos sí nos ofendieron en serio. Teníamos que haberles mandado de inmediato a los ejércitos del Chapo Guzmán y de los Beltrán Leyva para que sepan lo que es amar a Dios en tiempos de influenza, o por lo menos se debió de mandar enseguida el avión para que regresaran nuestros compatriotas secuestrados. Pero no, no urgía, había bastantes noticias aquí con qué entretener a la gente. Ya se acabaron, ahora sí hay que poner el grito en el cielo y hacérselas de tos. A los de aquí cerca, a los que están igual de jodidos que nosotros, a los chinos no porque así nos anda yendo...
¡Uf! con este gobierno del desempleo.
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