Compañeros de trabajo de Fanny Tostado Franco le celebraron su cumpleaños en Bolerama Alameda, por lo que se destaparon refrescos y se cortó un sabroso pastel en donde el juvenil rostro de la festejada fue embarrado.
Para Fany fue una noche muy alegre e inolvidable el hecho de estar con sus amigos y pasar momentos realmente gratos fue más que suficiente para darle gracias a Dios por este día que seguramente perdurará en su memoria para siempre.
Por cierto y como cosa del destino, la mamá de Fanny también cumplió año en este día, pero lo celebró en su casa con un exquisito pozole. Para ambas, muchas felicidades.
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