Dicho festival tuvo una duración de doce horas y hubo show de Dj’s, música electrónica, armonía en los corazones, danzantes de fuego, abuelos prehispánicos, luna y magia.
Sólo las palabras de Ballam López, su organizador, pueden describir cómo se vivió la espera del nuevo sol.
“En un algún lugar muy distante de la ignorancia y muy cercano a nuestra realidad cósmica, hubo un encuentro, una unión de mentes cósmicas. Danzaban Bajo la luz de la luna, vibrando con el viento para recibir el nuevo Sol; vestidos de colores brillantes entregaban su mensaje a la eternidad.
Entraron al sub mundo, a la realidad paralela donde se une el espacio y el tiempo, con la armonía en sus mentes, con estrellas, colores, personajes místicos, duendes, magos, haditas, seres cósmicos.
Los Seres inter espaciales (Dj’s), tuvieron la voluntad de llegar, viajar hasta nosotros para con su música volvernos eternos y regresarnos lo que nos pertenece: Nuestra consciencia.
Los abuelos prehispánicos vibraron y purificaron nuestras mentes y nuestro cuerpo para transformarnos, en lo que en verdad somos: Toltekas del sexto Sol”.
0 Comentarios