Siete Días: Huevos, carnitas y mujeres bonitas



Hace varios años, rumbo a la costa, le contaba al chofer del autobús que me transportaba, que yo venía de Tepatitlán. Él me respondió: "Ah, sí, me acuerdo cuando trabajaba en Rojo de Los Altos, me gustaba entrar al centro de Tepa aunque no tuviera que recoger pasaje, nomás para ver a las muchachas bonitas..."
En Puerto Vallarta, platicando con un amigo que vivía allá pero era de Guadalajara, le decía yo que venía de Tepa, y entonces él comentó: "Ah, ahí producen mucho huevo... me acuerdo que me gustaba comer carnitas en Tepa".

Con suerte dentro de Jalisco y en algunas partes cercanas como el Bajìo, medio se haya escuchado hablar de Tepatitlán; algunos podrán recordar las carnitas, el huevo o las "muchachas bonitas". Pero la suerte se acaba al alejarse algunos kilómetros del occidente del país, pues Tepa no figura en el conocimiento de las personas de esos lugares y para ayudarles a ubicarnos es necesario decirles que "estamos como a una hora de Guadalajara".

-Ahhh, ya más o menos sé dónde queda tu pueblo. -Nos responden.

Platicando con mi hermana, quien tiene más de un año trabajando y viviendo en la capital del país, cuando le preguntan que de dónde viene porque habla distinto, ella tiene que contestarles que viene de Tepa, que está -para mayores referencias- a una hora de Guadalajara.

Pero las señas para ubicar nuestro municipio ya no serán necesarias, pues según la alcaldesa, los viajes que se han hecho a varias partes del país han servido para que se dé a conocer la ciudad en aquellos lugares. Y de verdad que se necesita que nos conozcan en otro lado sin identificarnos por las carnitas, por el huevo o por las mujeres y que tampoco haya que decir que vengan a Guadalajara y que pregunten por Tepa.

Y es que, difícilmente alguien del norte, del sur o del oriente del país vendría a Tepatitlán sólo por comer carnitas, habiendo otros platillos igual de sabrosos en donde viven, a conocer a alguna muchacha para hacerla novia o casarse con ella, sabiendo que mujeres es lo que sobra en todo el mundo o a comprar blanquillos, que eso también hay en todo el país y que probablemente hayan sido llevados desde acá en algún tráiler o torton.

Pero hasta no ver; con la magia del internet tiene uno parientes, amigos, conocidos o compañeros de trabajo en varias partes del país, a los que se puede ver o al menos platicar con ellos prácticamente todos los días y por varias horas. Me daré a la tarea de preguntar a aquellas personas si ya saben algo más de Tepatitlán y si es así, que me digan si es gracias a las promociones que las autoridades municipales han dicho que han hecho.

Deberían decirle a Peña Nieto que ahora venga él a Tepa, que la alcaldesa ya fue a verlo una vez. En una de ésas y el gobernador mexiquense se enamora de una alteña y la cambia por la "Gaviota"... ¿Se imaginan una primera dama tepatitlense? Si el extraviado "Jefe" Diego hizo una carretera a Arandas -sin tener ningún cargo público-, tan sólo por tener una novia de aquel municipio, ahora un presidente de la república con mujer tepatitlense, qué no haría por la tierra de su amada.

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