Por Alejandrina Franco Camarena.- El pasado 23 de Abril, con motivo del día Internacional del Libro, un gran número de escuelas se dieron cita a la Plaza Morelos para llevar a cabo el maratón de lectura en voz alta.
En esta ocasión, y por decisión de la FIL (Feria Internacional del Libro) eligieron la novela inglesa Orgullo y Prejuicio, del conocido autor Jane Austen, novela de desarrollo personal que ha resultado exitosa a lo largo de los años, y que motivó a una gran cantidad de personas a participar en esta convocatoria de lectura en voz alta.
Por su parte el Gobierno del Estado regaló un libro y una flor a cada persona que participara en este maratón, dicha idea es precisamente para invitar e insitar a la gente a que lea más y se sienta más motivada al recibir algo, cosa que no sucedió en Tepatitlán, puesto que la lectura fue dirigida principalmente a niños de primaria.
En punto de las 9 am se dio inicio este maratón en la plaza Morelos, en donde por horarios fueron llegando las escuelas, principalmente primarias, que fueron inscritas a este maratón, en donde cada alumno leyó durante 4 minutos esta interesante novela, por lo menos para los adultos. De igual manera participaron aproximadamente 40 adultos, entre ellos funcionarios de gobierno, regidores y público en general, quienes no recibieron ni la flor ni el libro, ya que los 100 libros que compró el Ayuntamiento de Tepatitlán, o al menos así lo aseguraron, se destinaron 4 a cada escuela participante, para que estuvieran en las bibliotecas, cosa que impactó a varias personas mayores que asistieron a leer a la plaza con la finalidad de obtener su libro como se había dicho anteriormente, y más que nada el impacto es por que sin duda alguna este no es el tipo de lectura que se deba dirigir a niños de primaria, los cuales no entienden ni siquiera el título.
Lo importante en esto esto es que el proyecto resultó exitoso, por lo menos en los 63 municipios de Jalisco que participaron, y aunque a diferencia de Guadalajara, en donde la lectura se dirigió principalmente para adultos, y aquí a niños, es interesante contar con este tipo de eventos, que invitan a la población a seguir leyendo, ahora la duda es si al menos los 100 libros que se repartieron en Tepatitlán fueron destinados a personas que realmente los leerán o simplemente serán arrumbados en las bibliotecas de las escuelas primarias.
Por otro lado, y con la finalidad de que los niños pequeños vayan tomando el gusto a la lectura, algunos padres de familia escogieron un libro, el cual les leyeron a sus niños en el Kinder, los cuales se mostraron felices y sobre todo aprendieron gracias a la lectura que sí iba dirigida a ellos.
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