Por demostrar sus dotes de nadador y terminó ahogado

Lo mal aconsejaron las "cheves"

+ Aseguraba que una vez cruzó nadando el

   Río Bravo, pero no pudo contra una charca

Ya con unas cervezas encima, se le hizo fácil presumir que una vez cruzó nadando el Río Bravo cuando andaba de "mojado", por lo que quiso demostrar sus habilidades natatorias ante sus amigos en una charca en Tepatitlán, pero la muerte lo sorprendió entre las aguas, pese a los intentos de sus compañeros por salvarle la vida.

El deceso ocurrió este domingo al anochecer en una charca ubicada a un costado de la carretera que une la cabecera municipal con la delegación San José de Gracia, en el kilómetro 6. A ese lugar llegaron desde la mañana un grupo de amigos, entre ellos Sergio García García, de 33 años y vecino de la colonia Las Aguilillas, en Tepatitlán.

El grupo de personas consumió algunas bebidas embriagantes y alimentos y ya para el anochecer, aproximadamente a las 19:20 horas, Sergio comenzó a relatar de su etapa en Estados Unidos, cuando viajó a aquel país como indocumentado y para cruzar la frontera recorrió nadando el Río Bravo, asegurando que había sido relativamente fácil.

Tras recordar lo acontecido en aquella ocasión y envalentonado por las cervezas que ya había consumido, García García decidió mostrarle a sus amigos cómo se cruzaba a nado la charca que se encontraba a unos metros de donde se encontraba el grupo de personas, por lo que se levantó y se dirigió hacia el cuerpo de agua, el cual comenzó a adentrarse en él nadando.

Apenas avanzó unos metros cuando el sujeto sintió que comenzaba a ahogarse, por lo que sus amigos acudieron enseguida para rescatarlo, logrando sacarlo del agua y ponerlo en tierra firme, donde intentaron reanimarlo pero en la maniobra el agua se fue a los pulmones, perdiendo la vida minutos después.

Los compañeros decidieron entonces llamar al 066 para reportar el incidente, llegando minutos después una ambulancia de Protección Civil, pero Sergio García ya no presentaba signos vitales y fue declarado muerto en el lugar, solicitándose de esta manera la presencia de un agente del Ministerio Público, quien tomó conocimiento de los hechos y ordenó el traslado del cuerpo a la morgue de Tepatitlán.

Los compañeros del ahora occiso admitieron que habían ingerido algunas bebidas embriagantes, entre ellos el fallecido, aunque aseguraron que ninguno de ellos estaba visiblemente borracho, como para que haya ocurrido la tragedia.