Taparán, otra vez, calles con sillas para ver al Señor de la Misericordia

¿Y los peatones? Pues que se jodan

• Desde muchas horas antes, vecinos impiden de forma impune el libre tránsito de los demás

• El problema se agravó desde que recortaron los recorridos que provienen desde el Santuario

• Autoridades están conscientes de la situación pero no tienen ningún operativo para este año

7 días.- Se avisora el caos en las principales calles de Tepatitlán para los próximos días 27 y 29 de abril, donde la figura del Señor de la Misericordia recorrerá gran parte del centro de la ciudad y muchos aprovechan para “apartar” con sillas desde temprana hora las vías por donde pasará el contingente religioso, generando taponamientos y molestias con muchas horas de anticipación. Y las autoridades no están prevenidas ante lo que va a ocurrir.

Es costumbre que todos los años, durante la Feria Tepabril, en los días en que el Señor de la Misericordia y los carros alegóricos que lo acompañan, recorran las calles de Tepa visitando varias de las parroquias de la ciudad. El recorrido se hacía por las tardes y desde mediodía agentes de tránsito se encargaban de vigilar que los vehículos estacionados fueran siendo removidos por sus propietarios, lo que aprovechaban los vecinos para al mismo tiempo ir colocando sillas en las banquetas y aguardar sentados la caravana religiosa.

Sin embargo en los últimos años, a raíz de que el rector del Santuario del Señor de la Misericordia anunciara que los recorridos de la figura religiosa se iban a acortar y ya no visitaría todos los templos de la ciudad como antes y ante la permisividad de las autoridades municipales, la gente comenzó a colocar sus sillas desde las primeras horas de la mañana o incluso desde la madrugada o la noche anterior al paso del Señor de la Misericordia, generando molestias tanto a conductores como peatones.

Y es que los transeúntes ya no podía deambular libremente por las banquetas o cruzar a la otra acera donde tuvieran que hacerlo y se veían obligados a bajar al arroyo vehicular, con el peligro de ser atropellados por algún vehículo.

Y si a alguien se le ocurría mover una silla para poder circular, enseguida era objeto de reclamos e improperios por parte del dueño y las banquetas del centro de Tepa eran escenario de peleas entre peatones y vecinos prepotentes.

Pese a los episodios anteriores, las autoridades municipales actuales admiten que no tienen preparado ningún operativo especial para controlar este fenómeno.

Un funcionario de alto nivel que pidió que su nombre no fuera dado a conocer, refirió que en el ayuntamiento estaban conscientes del problema de las sillas y las molestias y peligros que representan, aunque por lo menos para este 2016 no se tenía preparado ningún plan especial para regular lo anterior.

El director agregó que agentes de Tránsito podrían intervenir en el asunto en caso de que el problema se salga de control. Además apeló a la buena voluntad de la gente y dejó entrever la posibilidad de que en el siguiente año sí se diseñe un operativo especial para afrontar este problema.