Zapotlanejo, Jal.- María Luisa Huerta Reyes se dedica a la costura desde hace 29 años y desde 2010 ha venido confeccionando vestidos para los trabajos de la Casa de la Cultura.
En este año María Luisa elaboró el vestido gigantesco de la catrina de Zapotlanejo, que en este año mide 20 metros de altura. Para vestir la enorme figura se elaboró un vestido con un faldón encima y unos holanes que la hace lucir sensacional.
Para su fabricación se gastaron cuatro rollos y medio de tela, cada uno de 100 metros aproximadamente. Este año el vestuario es más elaborado y con más detalles, el sombrero cambió un poco y se le agregaron algunos elementos.
El horario de trabajo de la señora María era de 9 de la mañana a 8 de la noche o más tarde si así se requería, laborando arduamente para que la catrina quedara muy guapa, no solo es el enorme vestido de la catrina, también es trabajo haciendo más disfraces como los de los esqueletos que andaban por la Casa de la Cultura, que también necesitaron sus vestidos.
Siempre acompañada de su madre María Reyes, quien tiene casi 97 años de edad, la señora María Luisa trabaja y señala que es un gran favor que le hacen el maestro Ernesto Navarro de la Casa de la Cultura y el alcalde Héctor, al dejar que su progenitora la acompañe en sus labores, pues es hija única y no tiene quien la cuide.
Las jornadas de trabajo son duras pero la satisfacción de vestir a todas las catrinas para este año son un orgullo para esta mujer quien tiene esta tarea tan delicada y representativa de los zapotlanejenses.
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