Los Supermachos



Si le gusta a usted el cine y tiene más de 40 años de edad, es probable que haya visto una o más películas de Cantinflas. A mí no me divierte mucho este actor tan famoso, prefería yo a Germán Valdés “Tin Tan” y después a Luis de Alba “el Pirruris”. Aunque en realidad las películas cómicas nunca han sido lo mío, me gustan más las de acción y de suspenso con actores como Bruce Willis, Steven Seagal, Robert de Niro, por supuesto Jack Nicholson, Harrison Ford y Al Pacino, y más acá Tom Hanks y Rusel Crowe. De los actores mexicanos sólo acepto con gusto a don Ignacio López Tarso. Pero llegué a ver varias películas de Mario Moreno Cantinflas, entre ellas la de El Profe.

En ésta llega el Profe a la estación del tren en San Bartolo, el pueblo más cercano a El Romeral a donde fue destinado, y nadie lo recibe porque así lo ordenó el cacique de este pueblo. Como quiera Él se las arregla para llegar hasta El Romeral donde la gente lo recibe con gusto. Ahí están el cura, el presidente municipal y don Margarito Vázquez el cacique. Inmediatamente se da cuenta el Profe de que va a tener problemas con éste.

Por eso me entretuvo esta película, por el tema del cacique que es el segundo personaje en importancia de la cinta, quien le hace la vida imposible al Profe. Cacique, dice el diccionario, es la persona que valiéndose de su influencia o su riqueza interviene arbitraria y abusivamente en la política y administración de una comunidad. En este caso don Margarito Vázquez no quería educación para los niños de El Romeral. La escuela estaba abandonada y en pésimas condiciones, y así el Profe comienza a padecer una serie de dificultades. En lugar de que el plantel sea objeto de algún arreglo, maestro y alumnos son desalojados del local donde funcionaba la escuela, así que tienen que improvisar una nueva en el campo hecha a base de carrizos. Donde estaba la escuela, el cacique -con el apoyo del presidente municipal- instala una cantina. Es más fácil manejar a un pueblo de borrachos que a un pueblo con educación.

Pero el Profe (Cantinflas) no se da por vencido, junto con sus alumnos intentan desmantelar la cantina y se desata una pelea en la que a duras penas logra el maestro rescatar a sus alumnos. 

Esto provoca que a su vez el cacique y sus hombres le prendan fuego la escuela improvisada que es consumida por las llamas, lo cual llena de frustración al Profe que se siente triste y decidido a dejar el pueblo. Pero ocurre que llega al pueblo el Gobernador, y aunque el Profe es secuestrado para que no se queje, sus alumnos lo rescatan y le explica al político la situación, y ésta finalmente se compone.

Como ésta hay muchas historias de caciques. En el cine, en la literatura y hasta en los comics. Hace algunos años fue muy popular una historieta que publicaba el caricaturista Eduardo del Río García, más conocido como Rius (quien murió hace un año), que se llamaba Los Supermachos y tenía lugar en San Garabato, Cuc, de donde era presidente municipal y cacique por más de 30 años Don Perpetuo, miembro del partido en el poder, el R.I.P., quien por supuesto se oponía también a la educación de su pueblo.

Así que cualquier parecido entre el Profe (de Cantinflas) y Don Perpetuo con la maestra Elba Esther Gordillo, no es mera coincidencia, oponerse a la educación es parte de la naturaleza del cacique, porque un pueblo sin educación es más fácil de manejar y de ser manipulado; mientras que un pueblo con educación se resiste y se enfrenta incluso al cacique.

Por eso la maestra Elba Esther Gordillo dijo este lunes, el día del inicio de clases, que Ella quedó en libertad y que se derrumbó la Reforma Educativa. Porque ésta busca una mejor educación para los niños de México, con mejores maestros, más preparados, que sean evaluados, que obtengan su plaza gracias a sus conocimientos y no porque la compraron o la heredaron, o porque estén bien (palancas) con el sindicato, como ocurrió durante décadas
cuando Elba Esther Gordillo caciqueó al SNTE. Esto no le conviene al cacique, en este caso a la cacique, Ella necesita maestros burros, que le obedezcan porque le deben la plaza, y si los maestros son burros qué se puede esperar de sus alumnos, ignorancia, atraso, que sean como los habitantes de San Garabato, Cuc para que los pueda manipular fácilmente Don Perpetuo. Por eso asegura la Doña que la Reforma Educativa se derrumbó, que vuelve Ella por sus fueros y que a este país ya se lo llevó la chingada.

El escritor e historiador Héctor Aguilar Camín dice que la manipulación de la justicia contra Elba Esther Gordillo (para ponerla en libertad), no la absuelve de su enriquecimiento inexplicable ni del daño que le hizo a la educación.  Pues no, pero tiene el apoyo del presidente electo Andrés Manuel López Obrador, quien el mismo día en que salió Ella a decir que al quedar en libertad la Reforma Educativa se derrumbó, dijo Él (otra vez) que la Reforma se cancela.

Una reflexión al respecto: “Destruir cualquier nación no requiere del uso de bombas atómicas o de misiles de largo alcance, sólo se requiere de un bajo nivel educativo, ignorancia de su historia y que sus estudiantes hagan trampa en los exámenes y ante cualquier barrera que encuentren en la vida. Los pacientes mueren a manos de esos médicos. Los edificios se derrumban construidos por esos ingenieros. El dinero se pierde en manos de esos economistas y contadores. La humanidad muere a manos de esos eruditos religiosos. La justicia se pierde en manos de esos jueces. El colapso de la educación es el colapso de la nación”. Este mensaje fue fijado en la puerta de una universidad en Sudáfrica.

Tanto Elba Esther Gordillo como López Obrador necesitan a un pueblo ignorante, sin educación, Ella para seguir manejando a los maestros burros, y Él para “gobernar” al país con sus ocurrencias. Un pueblo con educación no hubiera votado por alguien que promete que con sólo su ejemplo va a desaparecer la corrupción en México, que va a terminar con la violencia invitando al Papa Francisco para que nos diga cómo, y que al llegar al poder van a bajar los precios de la gasolina, el gas y la electricidad. Sólo un pueblo ignorante puede creer eso y votar por otro ignorante y mentiroso.

En la película el Profe se enfrentó al cacique. En la vida real la cacique es la Maestra. Y el pueblo ignorante sigue siendo el mismo. El cacicazgo vuelve con más fuerza. Que Dios nos agarre confesados.

Publicar un comentario

0 Comentarios