Sumario: Que los castren



Que los castren

Hay por estos días un anuncio en la televisión mexicana en el que una voz comienza preguntando: "¿A quiénes defiende la Comisión de los Derechos Humanos?" Y cada vez que oigo la pregunta respondo mentalmente y en automático: A los delincuentes.

Pero no es cierto, las comisiones de los Derechos Humanos, la Nacional, las estatales y todos los organismos que se dedican a eso no defienden exclusivamente a los delincuentes, defienden también a los guerrilleros, a los presos políticos, a los homosexuales y a todos quienes son discriminados; hasta a personas normales -común y corrientes- cuando consideran que están siendo violados sus derechos humanos.

Pero como son los delincuentes quienes están más expuestos a la violación de sus derechos humanos al tener la sociedad y quienes aplican la ley la necesidad de reprimirlos y castigarlos, es más frecuente que se violen sus derechos en este proceso; de ahí que sean mayoría los casos de delincuentes en los que tienen que intervenir las comisiones de los Derechos Humanos; y de ahí la idea un tanto generalizada de que dichas comisiones se dedican nomás a eso, pero no es exacto.

Sin embargo los promotores y defensores de los Derechos Humanos contribuyen frecuentemente a reforzar esa idea. Mire usted: Hace unos días un diputado priísta del Distrito Federal, Armando Tonatiuh González propuso ante la ALDF reformas y adiciones al Código Penal y a la Ley de Salud de la Capital de la República para inyectar un fármaco llamado Depo-Provera con el fin de castrar químicamente a los sentenciados por violación, abuso sexual y pederastia contra menores de 12 años.

Dicho fármaco, argumentó, disminuye la intensidad y frecuencia del deseo sexual y evita la erección y eyaculación y se aplica ya en otros países, por ejemplo en Alemania desde 1969; en Estados Unidos en Georgia, en Oklahoma, en Wisconsin y en Florida; en la República Dominicana se aplica desde el 2001 y se han agregado a la lista de países que practican la castración química: Puerto Rico, Perú, Chile, El Salvador, Colombia y Francia.

¿Y qué pasó con su propuesta?, pues nada que en cuanto la presentó el diputado Tonatiuh González brincó la asesora de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Elena Azaola, quien calificó como una perspectiva restriccionista el uso de químicos para castrar a violadores y dijo que "este método no es una buena solución, pues el abuso sexual es un problema complejo que no sólo tiene que ver con un deseo sexual, sino con factores sicológicos, sociales y de medio ambiente”.

Y no sólo Ella, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en San Lázaro, Omeheira López Reyna, también calificó la propuesta de "absurda", ya que no se puede permitir -dijo- que ningún ser humano sea sancionado de esta manera, aun cuando hayan cometido algún delito.
La legisladora del PAN indicó que este hecho es violatorio, "es como si estuviéramos avalando una pena de muerte. Aunque los delitos sexuales son catalogados como graves no podríamos aceptar este tipo de afectaciones y no podemos hacer justicia de esta manera".

¡Claro!, este método sería violatorio de los derechos humanos... ¿Cómo se van a violar los derechos de un violador de niñas y niños...? Que sea sentenciado, pague y salga de la cárcel para volver a lo mismo es lo de menos, hay qué buscarle otra solución, hay que darle tratamiento sicológico, hay qué apoyarlo para su rehabilitación, rehabilitación que casi nunca ocurre pero en fin... Porque dicen y dicen bien, que perro que da en tragar huevo aunque le quemen el hocico... pero son más importantes los derechos humanos del violador que los de sus víctimas...

El diputado Armando Tonatiuh González dijo que su propuesta de castración química estaría dirigida también a los sacerdotes que han abusado de menores de edad. “Primero -dijo- se les daría el tratamiento correspondiente, pero se les advertiría que en caso de reincidir en este delito serían candidatos a la castración”.

E ironizó con la reacción que provocó su propuesta: “A lo mejor por ello algunos sacerdotes han dicho que están en contra de esta propuesta; he estado viendo opiniones de que es inhumano. Inhumano es quien abusa de un niño, niña o mujer, pues los dejan marcados de por vida”.

Para mí que tiene razón. Los sacerdotes pederastas que abusan sexualmente de niños ni siquiera son castigados por la justicia de los hombres porque sus superiores siempre los ocultan y protegen; vaya, en la mayoría de los casos no son castigados ni por la propia iglesia, simplemente son cambiados de adscripción, los mandan a otra parroquia de la diócesis, a veces hasta a otra diócesis y en algunos casos graves tratan de rehabilitarlos en centros especiales que tienen para eso, pero la rehabilitación es muy raro que se dé, tarde o temprano vuelve a comer huevo el perro, aunque le quemen el hocico...

El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy propuso hace poco lo mismo, castrar químicamente a quienes hayan cometido el delito de abuso sexual o violación de niños, esto después de reunirse con el padre de un niño menor de cinco años violado por un pedófilo reincidente que acababa de salir de la cárcel. Dijo que se pondría todo en marcha para que las leyes anden por el buen camino, es decir, el de las leyes más severas”.

Y es que Francia se vio sacudida en esos días del pasado mes de agosto por la violación del pequeño, que fue secuestrado y atacado sexualmente por un hombre que hacía menos de dos meses había dejado la cárcel donde cumplió 18 años por violación de menores. Después de 18 años... volvió a las andadas.

El caso fue escandaloso porque el pedófilo de nombre Francis Evrard había disfrutado de una condena reducida y no cumplió los 27 años de prisión a los que inicialmente fue sentenciado. Cuando fue localizado por la policía después de secuestrar y violar al niño, tenía además un bote del medicamento Viagra abierto. Y para aumentar la indignación de los franceses, se descubrió que el Viagra le había sido recetado por un médico en la prisión, aunque éste alegó que no se le permitió revisar el expediente del prisionero.

Un líder del sindicato de policías de Caen, la prisión donde Evrard cumplía su condena, declaró que “se les había advertido a las autoridades penitenciarias que Evrard estaba diciendo cosas peligrosas”. En concreto “dijo que quería ir a algún país donde fuera fácil obtener niños”. No tienen remedio los pedófilos que abusan sexualmente de niños, esa es la regla, tendrá sus excepciones que la confirman, pero la regla es que "perro que da en tragar huevo..."

Por eso a mí no me parece tan descabellada la propuesta del diputado priísta Tonatiuh González ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, sería también un apoyo para quienes han sido condenados por ese tipo de delitos que les ayudaría a no reincidir, eso sin contar con que dicha propuesta habla precisamente de los reincidentes, la castración química sería para quienes hayan demostrado que no pueden controlar sus instintos, simplemente les quitarían un poco las ganas, que de otra manera les ganan y vuelven a caer...

Pero... ¿y sus derechos humanos? Los tienen, cierto, pero ¿no importan más los derechos humanos de las víctimas? A lo mejor no... a lo mejor tienen la misma importancia. El niño o la niña, la joven o la mujer tienen derecho a no ser violado(a)s, pero el violador también tiene derecho a gozar, a disfrutar, a saciar sus bajos instintos, ¿por qué le van a inyectar algo para que no sienta deseos?, tiene derecho a desear y a satisfacer sus deseos, son parte de sus derechos humanos...

Bueno ¿y si se le inyecta ese medicamento sólo con su consentimiento?, ¿si acepta la ayuda de la ciencia para no volver a incurrir en ese delito? Esa podría ser una solución... que fuera una pena optativa: Castración química o más años de cárcel...

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1 Comentarios

  1. hola me sorprende la limitaciones intelectuales de quien propone "el fin de castrar químicamente a los sentenciados por violación, abuso sexual y pederastia contra menores de 12 años."
    me imagino que para esa persona la violacion despues de los 12 es mas aceptable

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