Las perlas del 7





A veces uno escribe notas sobre diferentes temas, pero no siempre podemos conocer cuáles son o fueron las reacciones de quienes nos leen, ya sea de nuestro lector común o de las autoridades que deben hacer las cosas y no las hacen.

Al menos en la página web, podemos ver algunas reacciones de quienes siguen semana a semana lo que se publica en 7 días. También en las calles, sobre todo cuando hago los sondeos, algunas personas dicen que nos leen y que les gustó tal o cual cosa, incluso lo que no les gustó.

Pero no muchas veces tuve la oportunidad de ver la respuesta de nuestros empleados “los servidores públicos”. Hace poco pudimos decir en la nota titulada “7 días lo señaló y un milagro ocurrió” lo que veíamos en el parque de los Conejos sobre el abandono del área deportiva, pero en la misma semana comenzaron las obras de reparación de las lozas, pero a que no saben… ahí nomás quedaron, se ve que era para la foto nomás ¿qué les cuesta hacer todo de una vez? Con razón el boulevard está como está.

Pero bueno, igual es grato ver que el 7 sacude la alfombra de los irresponsables que van ocultando allí sus obligaciones, luego no me salgan con eso de que “nos recortaron el presupuesto”, ¿entonces qué hicieron cuando sí tenían ‘más’ dinero?

En fin, no quiero adelantarme y contarles lo que ha pasado en mi colonia y les dejo a continuación una carta enviada por un vecino, don Juvenal, como lo conocemos todos.

¡Por fin nos hizo justicia la revolución! perdón, el H. ayuntamiento. Me refiero a que el día de hoy, primero de agosto del año en curso, se limpió el lote baldío del que tanto nos quejamos y que está ubicado en las calles Mariano Azuela, Araucaria y Álamos, en nuestra colonia Los Álamos. Ahora, ya podrán jugar en él nuestros vecinitos y nosotros los adultos transitarlo sin temor alguno a la fauna nociva. Lo anterior se logró gracias a los artículos periodísticos del matrimonio que forman los señores Flavia Bustamante y Gustavo González, periodistas de este semanario y vecinos del fraccionamiento mencionado. Me pregunto: ¿por qué se tiene que llegar a estos extremos para que las autoridades cumplan con su deber o, para exigir a los propietarios de dichos baldíos a que lo cumplan?, cuando todo puede ser tan sencillo sin recurrir a estas acciones y quedemos agradecidos los ciudadanos afectados. Ahora lo que sigue es sancionar a quienes infrinjan el reglamento sobre la materia y que no suceda como lo de la basura que por doquier hay letreros que dicen: “Se sancionará…” etcétera, y jamás se aplican dichas sanciones ¡al cabo ya pasaron las elecciones! Gracias nuevamente a Flavia y a Gustavo, los pequeños de esta colonia y aún los vecinos más escépticos se los agradecerán. Atte., Juvenal Santillán Anguiano.

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