Dos países; el país A y el país B. Ambos tienen historias y culturas muy parecidas y los aquejan prácticamente los mismos males. En esta ocasión llaman la atención dos problemáticas que padecen ambas naciones y sus formas de sobrellevarlas.
Cabe destacar que las soluciones son muy distintas y cubren de momento la necesidad, pero en el futuro muy próximo los remedios aplicados ya no bastarán o traerán otras consecuencias igual de graves o peores que los problemas actuales que debían solucionar.
El agua. En el país A no alcanza el vital líquido para todos los habitantes; los ríos y presas ya no son suficientes para abastecer a toda la población, sin mencionar que ya hay muchas fuentes contaminadas. Solución: perforar a diestra y siniestra pozos que extraigan agua del subsuelo y así cubrir toda la demanda del vital líquido y todos conformes.
En el país B el problema es el mismo. La población crece, así como las industrias que requieren de agua; crece la demanda pero no así las fuentes de aguas superficiales y por eso no alcanza. Solución: tandear el agua por zonas poblacionales, aunque se enoje la gente, ni modo.
La electricidad. La población del país A es muy grande y las plantas hidroeléctricas no generan ni la mitad de energía eléctrica que el pueblo requiere. Solución: construir plantas termoeléctricas, de ésas que requieren combustible derivado del petróleo para hacer girar unas turbinas y así producir electricidad; donde no haya con qué más producir luz se instala una termoeléctrica y listo.
En el país B apuestan solamente por las fuerzas de la naturaleza para producir electricidad y es por eso que la luz es solamente posible por medio de hidroeléctricas; sin embargo hay poco agua para las presas por la sequía (y por eso tampoco hay para consumo), por lo que el gobierno se ve obligado a tandear también la electricidad, aunque nuevamente se enoje la gente cuando le corten la luz en su casa unas cuantas horas al día.
El problema de escasez de agua y energía que tanto se veía en las películas de ciencia ficción pesimistas ya se siente en estos dos países y varios más del mundo entero. En la nación A optaron por seguir exprimiendo y lesionando el medio ambiente con pozos de agua que eventualmente se agotan y agrietan la tierra, además de desertificarla y dejarla inservible, mientras que por otro lado poco les importa contaminar el aire con tanta termoeléctrica, calentar la atmósfera con gases de invernadero y acabarse el petróleo. Quién sabe hasta cuánto aguantará esta solución sin que la naturaleza se cobre la afrenta de manera violenta.
Por su parte en el país B al gobierno no le importa mucho que la gente se queje por falta de energía y agua, pues en realidad nunca le ha importado gran cosa lo que diga la gente, además que no hay mucho margen de maniobra. En este lugar se ha respetado un poco más el medio ambiente pero es una incógnita qué sucederá el día que falten el agua y la luz no por unas horas sino por días enteros. Falta muy poco para saber; quizá suceda algo parecido a las películas de Mad Max, donde la gente se peleaba y mataba por un bidón de gasolina.
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