Ya dijo

Logo-Pórtico

Nos oímos desde el lunes en el 550 de AM, otra vez

Como lo anticipamos, vino en la semana Emilio González, el gobernador.

Y vino con los generales y algunos cuates más.

Tepa se vistió de gala y hasta comida prepararon.

Inauguraron caminos y puentes y se aprovechó para hablar de buenas intenciones.
Digo buenas intenciones porque los temas son los mismos que se vienen abordando desde hace, por lo menos, cinco años: Ferrovía, Acueducto e impulso al agro.

Y son buenas intenciones porque, Emilio antes de anunciar sus ideas, aclaró que no tiene presupuesto. Hablar de lo que deseamos y no traer dinero no deja de ser proyecto, planeación o mera especulación.

Como discurso fue bueno. Animó a los presentes, sembró esperanza entre algunos funcionarios de Tepa y por lo menos nos prolonga un año más la agonía de los temas. Otro año más para que los avicultores, impulsores del ferropuerto, sigan creyendo en Emilio. Un año más para que los habitantes sigan esperanzados en tener agua de la presa de El Salto. Un año más para esperar lo que en años no ha llegado.

Pero ahora es diferente.

Ahora las palabras las empeñó el gobernador ante una presidenta. Y no sólo ante una mujer, es además priísta, ajena a su partido y ajena a las pugnas de su partido. Con ello se amplía la esperanza; la confianza la guardamos en la banca, para cuando quieran hacerle los honores de meterla al juego.

De la visita podríamos decir que fue más de lo mismo. PAN con lo mismo. Pero no, ésta tuvo una perspectiva diferente. Los tiempos son diferentes, los actores también. El público también.

En la Zona Metropolitana, Emilio González ya no siente lo duro, sino lo tupido. Le cuesta trabajo salir a la calle, le pesa acompañar a los “verdaderos grillos” de Jalisco. Por ello vino a cobijarse de pueblo en Tepa, en el mal llamado “interior” del Estado.

Como quiera que sea, Emilio vino a Tepa, saldó una cuenta pendiente de estar en la tierra de su amado Anacleto. Algún día volverá para conocer la casa y lo que quede del prócer Cristero de Tepa, quien goza de la casi idolatría del gobernador.

Tepatitlán tiene agenda. Tiene pendientes. Tiene necesidades y tiene proyectos.

El gobernador ya vino, ya dijo, ya se comprometió.

Falta esperar.
Emilio empeñó su palabra, dijo que apoyará a Tepa, aunque no sabe cómo sacará el dinero ni de dónde.

Si le creemos o no, esa es otra historia.

Emilio habló de lo que pretende hacer en Tepa, Aquí le esperamos con los resultados.

Ya dijo.

NOTA: Luego de una pausa de tres años, volvemos a ponerle “play” a la Radio Alteña a partir del lunes 01 de febrero, con el Noticiero Al Aire. Ahí les espero en el 550 de AM, desde las 8 de la mañana. Esperamos seguir contando con su apoyo.

Publicar un comentario

0 Comentarios