Cae asesino de la "entambada"

+ César Omar Macías sentía un amor
no correspondido por la ahora occisa


+ Mandó a que tiraran el cuerpo pero
no contaba con que lo denunciaran

Cayó el asesino de la mujer que fuera encontrada entambada y sin vida por el rumbo del núcleo de feria. Vecinos de la occisa rumoraban que había sido vista por última vez en una fiesta y que desde entonces estaba desaparecida, además que un conocido de ella fue el que la había asesinado. Al final resultó cierto lo que la gente señalaba.

Según relató a los medios el jefe de la policía, Víctor Muro, en presencia de familiares de la difunta, Ana María Castellanos González, de 22 años de edad y vecina de la calle 20 de noviembre, el pasado 10 de agosto salió de su casa por la noche diciendo que iría a una fiesta en compañía de unas amigas.

Personas que estuvieron en ese lugar señalaron que a esa fiesta asistió también César Omar Macías Muñoz, de 19 años de edad, vecino de Ana María y conocido de muchos años de ella y su familia. César Omar era de la total confianza de Ana María y sus papás y en lo que llevaban de conocerse nunca había habido ningún incidente entre ellos y tampoco había participado en algún hecho delictivo conocido.

Por lo que se sabe, César y Ana sólo eran amigos, pero el sujeto al parecer de un tiempo para acá tenía otras intenciones con Ana y deseaba entablar una relación sentimental con ella, cosa que presuntamente no correspondía la ahora occisa.

Esa noche, César se acercó con Ana y estuvieron platicando durante toda la velada; llegó la madrugada y Ana le dijo a sus amigas que se quedaría un rato más en la fiesta, por lo que ellas se fueron del lugar alrededor de las 2:30 horas.

Presuntamente, César Omar le hizo alguna proposición a Ana María, recibiendo la negativa de ella, por lo que al calor de las copas reaccionó de mala manera ante la respuesta escuchada y fue ahí donde decidió darle muerte.

Sobre lo anterior cabe aclarar que ni la policía municipal ni el Ministerio Público que comenzó a llevar a cabo las investigaciones han explicado la manera cómo César dio muerte a la mujer, ni tampoco la clase de proposición que le hizo.

Días después, según la policía municipal, César Omar se reunió con un grupo de amigos en una terraza ubicada en la calle Ganaderos; en ese sitio el asesino convenció a un conocido suyo menor de edad sobre deshacerse de un tambo "lleno de escombro" que tenía en su poder. El menor en lugar de hacer lo que le habían encomendado, cuando se dio cuenta que el tambo en realidad tenía el cuerpo de Ana María -a quien también conocía- ya en descomposición, dio aviso a los familiares y a las autoridades y fue así como se dio la detención.

Por su parte el Ministerio Público integró la averiguación previa por el delito de homicidio y ya presentó ante el juez tanto al acusado como las pruebas, por lo que en unos días más habría que dictársele sentencia.

Sueltan a sospechosos

El día del hallazgo del tambo, una persona señaló que había visto a dos sujetos que bajaban de una camioneta el contenedor sospechoso, por lo cual dio aviso a las autoridades, quienes confirmaron la existencia de un cuerpo femenino en descomposición.

La policía municipal, de acuerdo a las señas proporcionadas, estuvo buscando por la zona a los sospechosos, hasta encontrar una camioneta que supuestamente coincidía con la señalada por el testigo, mismo que identificó a los ocupantes del vehículo como los que momentos antes habían arrojado el cuerpo, por lo que fueron remitidos al Ministerio Público, sin embargo la fiscalía no les encontró elementos acusadores, por lo que los dejó en libertad.