En la parroquia de San Francisco en Tepatitlàn, la joven pareja formada por la señorita María Graciela González Plascencia y Cristian Corona Díaz contrajo nupcias, uniendo así ambos sus destinos para siempre.
La novia es hija de los señores Juan González Rivera y Felicina Plascencia Hernández, por su parte el novio lo es de Heriberto Corona Adame y Beatriz Díaz Cárdenas, fungiendo como padrinos Heriberto Corona Estrada y Eva Corona Adame.
En el trascurso de la eucaristía el sacerdote José Luis Solís los invitó a estar siempre juntos y amarse y quererse por el resto de sus vidas; después de estas palabras les dio la bendición al mismo tiempo que señalaba que lo que Dios acaba de unir, que no lo separe el hombre.
Al final de la ceremonia los desposados se trasladaron al Vivero Japonés en donde invitados de Guadalajara, Chihuahua, Tampico, México, San José, California y Montreal, Canadá los acompañaron en este importante día y les desearon la mayor de las felicidades.
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