Con
una sencilla ceremonia, pero de un gran significado para la familia Guerrero
Orozco, se llevó a cabo el bautismo de su pequeña hija en el templo del
Espíritu Santo en Tepatitlán.
Los
orgullosos padres, los señores Alejandro Guerrero García y Mayra Orozco
Padilla, acompañados de Francisco Orozco y Silvia Padilla, padrinos y abuelitos
de la niña, gustosos aceptaron la responsabilidad de apadrinar a la niña y de
hacerse responsable de ella si fuese necesario.
En
el transcurso de la ceremonia el señor cura José de Jesús Ruvalcaba les habló
sobre el bautismo y del compromiso que adquieren con la niña y la iglesia,
después de estas palabras, la pequeña fue acercada a la pila de bautismo en
donde se le roció el agua bendita en la cabecita al mismo tiempo que el señor
cura pronunciaba el nombre de Anahí.
Poco
más tarde se ofreció una exquisita comida en un rancho de la familia.
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