La que mató a su hijo en San José
+ No estaba acusada de parricidio, como
lo
dijo la Fiscalía, sino de homicidio culposo
+ Lo máximo que recibiría por los tres
delitos
sería 15 años, pero puede salir bajo caución
Pese a que la Fiscalía General del Estado
había informado que Dolores Marcela Tapia Tapia, de 24 años, había sido
consignada ante el juez por parricidio, en el juzgado donde se está llevando a
cabo su proceso refirieron que el delito imputado a esta mujer es el de
homicidio culposo, el cual tendría una pena máxima de ocho años y con la
posibilidad de salir libre bajo fianza.
A Tapia Tapia, vecina de San José de
Gracia, delegación de Tepatitlán, la Fiscalía Central la acusó por los delitos
de inhumación clandestina, falsedad de declaraciones y homicidio culposo, luego
de haber fingido ante las autoridades la desaparición de su hijo de tres años,
Jonathan Cortés, cuando en realidad lo envolvió en plástico y lo ocultó en un ropero
de su casa, creyéndolo muerto, en hechos ocurridos en el mes de febrero.
Sin embargo, a nivel estatal la misma
Fiscalía distribuyó un comunicado afirmando que Dolores Marcela había sido
remitida al juez por parricidio.
Actualmente se encuentra recluida en el
Centro Integral de Justicia Regional Altos Sur (CEINJURE), donde un juez de lo
penal está llevando a cabo su proceso y ya le dictó auto de formal prisión,
aunque la parte defensora ya apeló el caso, lo que alargaría el tiempo para dar
a conocer la sentencia definitiva.
El Juzgado de lo Penal de Tepatitlán,
cuyo titular es el juez Francisco Ulloa Sánchez, informó que el Ministerio
Público de esta ciudad consignó a Dolores Marcela por los delitos de homicidio
culposo, inhumación clandestina y falsedad de las declaraciones, por cuyas
penas en conjunto podría recibir hasta 15 años de prisión.
La pena de inhumación clandestina
significaría 1 mes a 2 años de cárcel, mientras que la falsedad de
declaraciones acarrearía de 1 a 5 años de prisión. Estos delitos ya fueron
admitidos por el juez y se está a la espera de fijar una fianza.
En cuanto a la acusación de homicidio
culposo, la pena máxima sería de 8 años, aunque también puede alcanzar fianza,
pero ésta sería de una cantidad muy superior a la de los otros delitos
señalados.
La defensa de Marcela Tapia apeló el caso
por lo del homicidio culposo, lo que tiene detenido el proceso, las sentencias
y la fijación de las fianzas.
El personal del juzgado mostró extrañeza
al conocer a través de los medios de comunicación que Marcela había sido
acusada de parricidio por parte de la Fiscalía, pues en la consignación
original siempre se especificó que era homicidio culposo, además de que la
mujer no habría podido ser señalada por el primer delito, pues por los indicios
hallados, este tipo de crimen no hubiera podido ser demostrado.
Custodia en trámite
Por su parte, Antonio Cortés, abuelo
paterno de los hermanos de Jonathan respondió que el padre de los pequeños,
Julio César Cortés Aguirre, quien vive en Estados Unidos y ya tenía un año
separado de Marcela Tapia cuando ocurrió la muerte del pequeño, comenzó los
trámites para que los otros niños queden bajo custodia definitiva de la familia
paterna.
"Julio César está haciendo los
trámites para que nosotros tengamos la custodia de los otros dos niños y
ahorita está consiguiendo unas cartas que le pide el gobierno de Jalisco como
requisitos", explicó el abuelo paterno.
Agrega el hombre que desde que ocurrió la
muerte de Jonathan, el padre no ha podido venir a Tepatitlán a ver a sus hijos,
pues Julio César se encuentra "sin papeles" en Estados Unidos, lo que
también ha complicado reunir los requisitos para que la custodia de los
hermanos se dé en forma definitiva a los abuelos paternos.
Sin embargo, el proceso sigue en trámite
y los abuelos de los hermanos de Jonathan confían en que los pequeños logren
quedarse de manera legal y definitiva con ellos.
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