Les traían coraje
• Primero los aventaron contra una casa con una camioneta de tres toneladas
• Después los agarraron a balazos, se escaparon y abandonaron el vehículo
Dos policías municipales de Tepatitlán se dirigían a trabajar a bordo de una motocicleta particular, cuando fueron embestidos por una camioneta, que los mandó hasta el interior de una casa, para luego ser atacados a balazos por los tripulantes de otro vehículo y después darse a la fuga. Los oficiales quedaron malheridos y están recuperándose en un hospital de esta ciudad.
Fue el martes por la mañana, dos policías de Tepa, uno de 41 años y otro de 38, se trasladaban en una motocicleta de bajo cilindraje, con sus uniformes de oficial, por las calles de la colonia Las Aguilillas hacia la comisaría ubicada en la avenida Jacarandas, pues se disponían a cumplir con su jornada laboral.
Pero en el cruce de las calles Tucán y Canario fueron alcanzados por una camioneta Ford F-350 en color blanco, presuntamente propiedad de una empresa avícola y al estar emparejados el conductor viró violentamente hacia los motociclistas, introduciéndose ambos vehículos en la cochera de una casa, quedando arrollados los oficiales.
Tras la camioneta venía también una pick up Chevrolet Silverado en color negro, de la cual bajaron otros sujetos y abrieron fuego en contra del oficial de 41 años, para luego escapar a bordo de los vehículos con rumbo desconocido. Minutos después la F-350 fue encontrada abandonada a unas cuadras del lugar, en el cruce de las calles Tildio y Periférico.
Dentro de la cochera de la finca quedaron tirados los policías y algunos vecinos se acercaron a auxiliarlos, aunque la vivienda quedó dañada en su estructura y a punto de caerse, los barrotes del cancel quedaron deformes y encima de los oficiales.
El que recibió los balazos, uno en la pierna y otro en el brazo, quedó consciente y trataba de moverse luego de haber sido atropellado y baleado, mientras que el otro oficial, el de 38 años, tenía un fuerte golpe en la cabeza y había perdido el conocimiento.
Más tarde fueron auxiliados por paramédicos de Protección Civil y llevados a un hospital particular, donde fueron reportados graves de salud, aunque de acuerdo con el alcalde Hugo Bravo, con el transcurso de las horas fueron declarados fuera de peligro, sin embargo el del golpe en la cabeza tardaría varios días en recuperarse.
La zona de la agresión fue acordonada debido al peligro de derrumbe de la casa y a que la Fiscalía ordenó que no se tocara la escena para poder hacer las investigaciones.
Respecto a los motivos del ataque a los policías, trascendió que los sospechosos tendrían un pleito personal con uno de los oficiales heridos.
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