El presidente de la república sigue siendo el mismo tipo pendenciero que conocemos desde hace 18 años y su estilo y línea de gobierno ha sido prácticamente el mismo desde que inició hace tres meses, pero por lo menos muestra algunos signos de que comienza a rectificar o por lo menos a hacer caso a alguien más que no sea él mismo.
Circuló un video promocional, horrible, mal editado, hecho con las patas y todas las vísceras del mundo, de la Secretaría de Turismo, que además de larguísimo no promueve nunca el turismo, es un galimatías y lo único que queda claro para quien ve el material es el apoyo a López Obrador y su partido Morena, pues ambas imágenes salen lo suficiente como para pasar desapercibidas.
De inmediato los del PAN se quejaron y días después AMLO mostró un poco de cordura en un gobierno donde aquella brilla por su ausencia.
El presidente ordenó públicamente dejar de exhibir el video, argumentando que sólo se les daba motivos a la oposición para hablar mal del actual gobierno; “para que vean que no somos igual que ellos”, dijo.
La orden obedece más a cuestiones de imagen de López Obrador y del mismo gobierno federal, pero por primera vez admite el Peje que algo no está bien y de paso le dejó ganar una a la oposición.
Pero algo es algo, dijo el calvo y AMLO por un segundo no fue el viejo terco e intransigente de siempre.
Una actitud parecida mostró su esposa Beatriz Gutiérrez, quien lejos de portarse altanera, vulgar y cabeza hueca, tuvo un gesto de humanidad -no le quedaba de otra- al darse unos segundos y atender a un grupo de encargadas de estancias infantiles, quienes le expusieron el problema de que este año su esposo ya no quiere dar dinero para las guarderías.
Doña Beatriz pudo haber esquivado el asunto y haberle hecho como su esposo y decirles “ya, ya, ya” y dejar hablando solas a las quejosas, pero las escuchó y prometió tratar el tema con López Obrador y la Secretaría de Bienestar, antes Sedesol.
Y a eso se le suma un amparo que otorgó un juez de Nuevo León, promovido por un senador de Movimiento Ciudadano, para ordenar al gobierno federal que no le haga al cuento y otorgue recursos (al menos por este año) a las guarderías.
El PAN y MC ya ganaron una cada quien al gobierno federal; el PRI anda más ocupado en su asamblea y actuando sus integrantes como si fueran gobierno, cuando en realidad están muy lejos del poder y encima sin lana. Y el PRD peor tantito, está prácticamente muerto y dicen los que saben que desaparecerá como tal a mediados de este año.
Pero bueno, posiblemente más obligado por las circunstancias que por otra cosa, Andrés Manuel afloja en algo insignificante, pero valioso para sus adversarios.
Quizás ese sea el camino, una presión de la sociedad y los partidos de oposición, para que el gobierno y su presidente enderecen el camino y gobiernen para todos.
Y en cambio otros morenistas son nefastos: Napito queriendo crear una central obrera similar a la CTM y detentar todo el poder de todos los sindicatos él solo; Salgado Macedonio exhibiendo su imbecilidad y diciendo que van a desaparecer el poder judicial y Noroña diciendo que lo de Venezuela y su crisis es puro cuento y burlándose de la gente que sufre y muere en aquel país o llamando mentirosos a los que se oponen a la dictadura de Maduro.
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