• Que va a organizar una consulta, o sea que ya bailó
El problema con la Presa El Zapotillo está más cerca de quedar otros tres años en el aire que de encontrar una solución, esto luego de la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a la comunidad de Temacapulín, municipio de Cañadas de Obregón, donde anunció una consulta a los pobladores para determinar si el proyecto de El Zapotillo continuaba.
López Obrador se comprometió a que esa población, al igual que Acasico y Palmarejo, no se perjudicarían con la presa, y ofreció volver en un mes para conocer lo decidido por los pobladores, y aunque los pobladores escucharán hoy sábado al director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Germán Martínez Santoyo para conocer el proyecto, estos ya adelantaron que tienen derecho a decir no y que de ninguna manera aceptarán que se les responsabilice por la inversión derrochada en la obra, por las deficientes políticas hídricas implementadas en las ciudades y el desabasto del agua.
Otra de las razones por la que se oponen a la obra es que la propuesta no resuelve de manera equitativa, integral y sustentable el problema de abastecimiento de agua en la región. Y es que la propuesta planteada por el Presidente de la República para que la Presa El Zapotillo no inunde Temacapulín, Acasico y Palmarejo, es un “anteproyecto”, que no garantiza el abasto de agua en la región de Los Altos ni alternativas para León, Guanajuato, reconoció el director de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Germán Martínez Santoyo, durante la visita de la semana pasada.
El funcionario federal no negó que no tienen contempladas soluciones todavía para León, y que todavía deben analizar si la propuesta alcanza para resolver la escasez de agua en Los Altos de Jalisco. Serviría si la cortina llegara a 105 metros como estaba planeada originalmente, pero ante la negativa de los pobladores, la cortina quedó en 80 metros, lo que hace prácticamente imposible el suministro del agua para Los Altos.
Guanajuato le regresaría el favor a Jalisco
Poro otro lado, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, gobernador de Guanajuato lamentó la decisión de dejar fuera a León de la repartición de agua y consideró “urgente” reunirse con López Obrador, precisar con él las opciones para dotar de agua a la ciudad de León, y definir qué pasará con los recursos que Guanajuato invirtió en El Zapotillo, y advirtió que buscarán todos los medios para que se respete el acuerdo establecido.
Rodríguez afirmó que si desaparecen sus derechos que tenían en el decreto, también sus obligaciones, por lo que Guanajuato no tendría por qué entregar agua de la Presa Solís al Lago de Chapala, otra fuente de abasto de la Zona Metropolitana de Guadalajara.
“Al tumbar este decreto, en caso de que se diera, porque ahorita repito, sigue vigente, pues no tienen sentido las obligaciones que nos han impuesto a los guanajuatenses que por cierto hemos cumplido desde el 95 puntualmente”.
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