Vaya para Ustedes el saludo semanal de
costumbre.
Esta semana que recién termina, tuvo
un especial significado (para algunos bueno, para otros malo e
indiferencia para otros tantos mas, supongo) debido a la celebración
de un aniversario más de la Revolución Mexicana, que trajo consigo
un lunes de descanso para burócratas, banqueros y otros más con el
pretexto de hacer el consabido puente.
Ese es, desde mi muy personal punto de
vista, uno de los problemas de la idiosincrasia del Mexicano. No hay
homogeneidad ni en este tema ni en otros en la reflexión y forma de
ver las cosas de nosotros. Es muy difícil ponernos de acuerdo. Hasta
cierto punto se entiende que es natural que sobre un mismo tema
existan diversas opiniones, pero hay cosas medulares en las que
deberíamos estar totalmente de acuerdo.
Sin embargo no ocurre así. Las
revoluciones han tenido lugar por inconformidades generadas por un
estado de cosas que no satisfacen al grueso de las masas.
Revolucionar es cambiar las cosas. El problema es que precisamente en
este proceso de cambio, surgen intereses mezquinos que confunden y
engañan para que dichos cambios no siempre sean para bien y es ahí
en donde nos falta capacidad de discernimiento para apoyar los
cambios que son para bien, los que son para mal y por ende saber la
diferencia.
En el caso de la Revolución Mexicana,
no dudo que haya nacido con buenos propósitos, pero al paso de los
años y tras la pérdida de miles de vidas que costó, es bueno el
analizar si realmente valió la pena el sacrificio de tanta gente y
si es que logramos conseguir la meta que se propuso.
No es nada fácil el sacar conclusiones
al respecto cuando uno ve el panorama nacional en que nos
encontramos. Inseguridad para el tránsito de mercancías y personas
en amplios sectores del País. Libertades restringidas y no
precisamente por las autoridades. Desempleo, pobre nivel de
educación, huelgas, paros, marchas, bloqueos, anarquía ante la
pasividad de las Autoridades en determinados casos como los paros de
los Maestros en Oaxaca y otros lugares. Bloqueo de carreteras
federales en vías de gran importancia como lo que ocurre en Sonora y
que entorpece la circulación de mercancías y personas por un
problema de Agua entre una comunidad indígena y el gobierno estatal
de ese Estado, ante la pasividad de las Autoridades para remediar el
problema y solucionar las cosas para que lleguen a la normalidad.
Un gran nivel de corrupción en donde
saltan los nombres de la Maestra y “Presidenta Vitalicia del SNTE
Elba Esther Gordillo” así como de Romero Deschamps en Petróleos
Mexicanos que es “de todo el pueblo mexicano” y una empresa que
reporta pérdida de mas de dos mil millones de pesos tan solo el año
pasado por “ordeñas” que se le han hecho a sus redes, sin
mencionar cuánto se gasta en elevados sueldos que se paga a los
trabajadores más privilegiados y las transas de que se habla desde
hace muchos años, que se hacen al interior de esta paraestatal.
La tierra que nos alimenta, con un
rezago tecnológico que hace muy raquítica la producción de
alimentos y nos encadena o compromete a comprar e importar muchos
productos para alimentar al pueblo y a precios que no son
precisamente bajos pues la canasta básica se ha ido elevando
paulatinamente.
México, siendo el 4º productor de
petróleo en el mundo, tiene problemas en sus finanzas y pagamos la
gasolina como si fuéramos país del primer mundo y cada mes
aumentará no sé por cuánto tiempo más.
Luego los elevados índices de
impunidad. En la impartición de la justicia, se habla de que más
del noventa por ciento de los delitos que son denunciados, no llegan
a tener resultados positivos en cuanto a que el responsable tenga su
justo castigo.
Podría seguir un poco mas adelante
señalando los graves problemas que enfrenta nuestro Pais, pero creo
que con esto que he señalado anteriormente, es más que suficiente
como para ofrecer un panorama de los graves problemas que nos aquejan
y que requieren de una urgente solución para que podamos vivir
mejor.
Aparte, no quiero, amigo lector,
echarle a perder el día recordándole cosas que sentimos que ocurren
cotidianamente. Lo anterior fue solamente para enfatizar o
reflexionar en la siguiente pregunta: Consiguió sus propósitos la
Revolución Mexicana y estamos contentos con sus resultados?.
Esa pregunta le toca a cada uno de
Ustedes darle respuesta. Nos leeremos en la próxima entrega.
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