¿Quién sigue?

Estamos a cuatro semanas de que empiecen las campañas políticas de los aspirantes a dirigir los municipios de Jalisco. Claro, también elegiremos en unos meses al próximo presidente de México y al gobernador de Jalisco.

 Quien sea el ganador, ni el país ni el Estado ni los municipios cambiarán por arte de magia.

 Los problemas de cada población son tan grandes, tan complejos que no son, no han sido suficientes tres años, ni seis, para resolver las necesidades de la sociedad.

 No ha sido suficiente la alternancia, ni la democracia para satisfacer las necesidades de la población.

Si, ya cada partido tiene a sus abanderados, sus aspirantes a regidores, a diputados, al Senado; pero no es suficiente. Ni los partidistas ni los independientes. No son suficientes.

Si cada día las necesidades de la población crecen, si al paso de los días la gente se siente menos representada, menos atendida, menos escuchada, ¿qué más da quien vaya arriba en las encuestas?, ¿qué importa quién gane o pierda la próxima elección?

 Al margen de los resultados del domingo 1 de julio próximo, hay amplios sectores de la población que sólo esperan que concluyan las actuales administraciones, la nacional, la estatal, los Congresos y los Ayuntamientos.

 Al grueso de la población le interesa saber quién viene, quién sigue en el gobierno.

 Ya perdimos la capacidad de sorpresa, la capacidad de asombro.

 A la gran mayoría de la población no le importa si es un candidato, un color, una alianza. A fin de cuentas, “todos son iguales”, pocos hacen la diferencia, pocos son diferentes.

 ¿Usted ya sabe por quién va a votar?, ¿o es de lo que creen que todo está dicho, que ya todo “está amarrado”?

 Ya los problemas nos rebasaron; ya las necesidades son mayúsculas; ya los actuales cumplieron o no cumplieron; ya dieron lo que tenían que dar. A lo que sigue.

¿Quién sigue en esta vorágine política?, ¿quién será la próxima víctima política de esta sociedad insaciable?