Con una misa de acción de gracias en el templo parroquial del Espíritu Santo, la profesora Dulce María Castellanos Conde compartió su grande alegría por las bendiciones recibidas de parte de Dios.
Invitó a familiares y amigos que vinieron a acompañarle desde Yucatán y por supuesto a sus familiares y amigos que radican aquí en Tepatitlán, sus hijos Raúl Humberto, Zelmy e hijo Político Alfonso, sus nietas Damaris, Yamile y Juan José y sus bisnietos: Santiago André, Mauro Alejandro y Caleb Naím.
Siendo las 13:00 horas del sábado 9 de febrero, se engalanó la parroquia del Espíritu Santo para festejar a la nonagenaria Dulce María. A la misa asistieron a concelebrar los canónigos José Hernández Rojo, Rafael Córdova Esparza y José de Jesús Barba Navarro.
En la homilía que ofició el Canónigo Pepe resaltó la energía, la alegría y entusiasmo con que Dulce María vive cada momento de su vida, así como lo servicial que ha sido ejemplo a seguir para cada uno de nosotros.
Al final de la misa Dulce María tomando el micrófono agradeció el rol de vida que con amor y alegría ha desepeñado, y pidió sabiduría para dejar lugar a aquellos que han de tomar su lugar en las múltiples tareas que ha desepeñado en su apostolado.
Terminada la Sagrada Eucaristía, festejada e invitados se dieron cita en la Terraza Santa María.
Durante la tarde convivieron alegremente disfrutando además de la exquisite comida y bebida, la música en vivo, los poemas que Dulce María declamó tan hábilmente, los cantos de familiares y no faltaron las famosas bombas yucatecas.
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