¡Hola!... Después de 7 días estamos nuevamente con ustedes para comentarles que tuve la oportunidad de estar en la isla de La Magdalena en Baja California Sur y para mí fue una gran experiencia el estar en el santuario de la ballenas y ver esos enorme animales de más de 13 o 14 metros de largo, en este viaje estuve acompañado de mi esposa Pili Gálvez y de mi compadre Roberto Alcalá y su esposa Evangelina Guerrero, así como dos de sus nietos. Para llegar a La Paz, Baja California, viajamos por avión y lugar en donde comimos unos muy sabrosos mariscos, ahí rentamos una camioneta para irnos a ciudad Constitución en donde pernoctamos y al día siguiente salimos al Puerto de San Carlos a una distancia de 57 kilómetros para tomar una lancha de un amigo de mi compadre Roberto que nos adentró a una enorme laguna, después de casi 40 minutos de viaje en la laguna empezamos a ver a la ballenas que salían a respirar muy cerca de la lancha, aproximadamente a un metro de donde estábamos; nunca tuve la suerte de tocarlas, sin embargo hubo otros que sí la tuvieron, y después de más de tres horas de convivir con los cetáceos en esta enorme laguna decidimos bajar a tierra en la isla en donde vive un gran grupo de pescadores, gente que se dedica en su totalidad a este trabajo. La isla es totalmente carente de vegetación en sus 314 km2 y su máxima elevación no pasa de 4 metros, es una isla compuesta en su mayor parte de arena y en donde los nativos cuentan historias de que anteriormente llegaban asaltantes en sus barcos y que ahí enterraban sus tesoros, sin embargo esto no se ha comprobado, aunque si se han encontrado restos humanos, pero decidimos dejar esas historias para pasar a un comedor rústico de los pescadores, y lo rústico se olvidaba con lo exquisito que guisaban las langostas, pescados, camarones y lo más importante es que todo era muy fresco, así que cuando vayan de visita a estos lugares les recomiendo que coman ahí, que aunque es algo carito sí que vale la pena. Pues bien, después de nuestra visita regresamos a La Paz, una ciudad de 250 mil habitantes y con mucho comercio en donde dormimos para salir nuevamente el domingo para la ciudad de Guadalajara y de ahí a Tepatitlán… Uno se pregunta por qué algunos alcaldes son difíciles para que contesten el teléfono, cuando andan de candidatos a la hora que les llames te contestan, pero cuando ganan como que ya no quieren contestar, en este caso tenemos al presidente de Yahualica Alejandro Macías Velasco, persona muy difícil para contestar el teléfono y si hablas a la presidencia te dicen que anda fuera del municipio o tiene una reunión, el caso es que siempre tiene una excusa, esperemos pronto platicar algunas cosas con él, pues existen en muchas personas descontento de cómo está trabajando… Quien celebró en esta semana su cumpleaños fue la doctora Tita Ochoa Ortiz, quien fue agasajada en grande por su esposo, y bien que lo merece la señora. Otra que cumplió años es Blanca de la Torre y seguramente lo celebraran en el bello Jalos este sábado… Ayer viernes festejó en compañía de su familia un cumpleaños más, el joven doctor Gerardo Martín del campo, a quien le deseamos muchas, pero muchas felicidades… También le enviamos unas felicitaciones a la señora Marcela Mojica Centeno quien el día de mañana domingo estará cumpliendo un año más, para ella nuestras más sincera felicitaciones esperando que se la pase de lujo en compañía de su familia… Quien también estará de manteles largos es Mireya Plascencia, ya que este jueves siete también festejará su cumpleaños, felicidades… Espero que nuestro actual gobernador Enrique Alfaro destine pronto una buena cantidad de dinero para rehabilitar totalmente nuestras carreteras, pues en la actualidad están para llorar, por cierto el primer mandatario estatal ha sido criticado por que en su gira de trabajo que realizó en Los Estados Unidos le tomaron unas gráficas en donde se le ve viendo un partido de basquetbol, críticas para mi gusto infundadas, pues tiene el mismo derecho que cualquier ser humano para divertirse y posiblemente lo hizo cuando ya su agenda de trabajo la había terminado, pues el evento deportivo fue en la noche. En fin señores, como todo tiene un final, no me queda más remedio que decirles que aunque se escondan bajo las piedras, siempre estarán En la mira.
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