Ya todos sabemos que el señor Andrés Manuel López Obrador está mal de la cabeza, que padece (por lo menos) demencia senil, o como dirían en mi barrio, que ya no le sube el agua al tinaco.
Cualquier mexicano con dos dedos de frente lo sabe, que algunos (pocos o muchos) se nieguen a aceptarlo, es otra cosa, pero de que lo saben, ya todos lo saben. Como dice la canción La Boa de la Sonora Santanera: y los mexicanos, lo saben, lo saben.
De qué otra forma se podría explicar, que el Presidente haya dicho este martes “Ahora me entero de que existe el Conapred”, cuando Él mismo nombró en noviembre a la actual presidenta de Conapred, Mónica Macisse, quien hace poco estuvo en una de sus conferencias mañaneras, a su lado, hablando en su tribuna, y al terminar su intervención se dieron un abrazo.
¿Alguien puede explicar eso de otra manera que no sea la demencia senil? Cuando no se trate de algo más grave, como la oligofrenia, la esquizofrenia o el halzheimer…
Sin embargo, no es esto el tema principal de esta columna, sino otro derivado del mismo: ¿Cómo sacarlo del poder, antes de que destruya por completo a nuestro país?
Quitarle el poder a este hombre enfermo, pasa por quitarle antes la mayoría en la Cámara de Diputados, por lo menos la mayoría calificada que consiste en las dos terceras partes de los votos, es decir, si hay 500 diputados, se necesitan 334 votos para aprobar algunas propuestas como las reformas a la Constitución, que sí los tienen Morena y sus aliados PT, PVEM y PES.
En el Senado es diferente, ahí no tienen Morena y sus aliados mayoría calificada que sería de 85 votos, tienen sólo 77, por eso es que ahí se atoran frecuentemente algunas iniciativas que aprueba la Cámara Baja; pero hay otras que no requieren la mayoría calificada sino sólo la mayoría simple que es la mitad más uno, y de esta manera le pueden aprobar casi todo lo que quiera López Obrador, porque los diputados de Morena están para servirle a AMLO, no a México.
Por lo tanto, el primer paso para sacarlo del poder es quitarle la mayoría en la Cámara de Diputados, que no tenga con sus aliados ni la mayoría simple, para que no le aprueben al Presidente todo lo que se les pegue la gana, hasta su reelección.
¿Qué hacer para quitarle la mayoría en la Cámara Baja?, yo he propuesto algo aparentemente muy simple, que sin embargo choca con los intereses de los partidos políticos: Que vayan en bloque PRI, PAN, PRD y MC, y que sus candidatos no pertenezcan a ninguno de esos partidos, sino que esa alianza postule a candidatos externos, ciudadanos, independientes, para que así, sea quien sea el candidato en cada distrito, muchos -la mayoría tal vez- votemos por ese candidato, cuyo único compromiso sea votar siempre contra Morena en la Cámara de Diputados.
Claro que deberían de seleccionar a los mejores mexicanos, a ciudadanos ejemplares, pero sobre todo comprometidos con evitar la dictadura que pretende López Obrador.
Será muy difícil que los partidos renuncien a postular a sus propios militantes, lo más que se logrará, creo, es que vayan en bloque, que se pongan de acuerdo en cuál distrito el candidato deba ser de alguno de esos partidos, y en cuál de otro. Eso, sin embargo, ya sería ganancia. Si muchos, la mayoría, votan por el candidato de esa alianza PRI-PAN-PRD-MC, es posible derrotar a Morena.
Recientemente el señor López Obrador dio a conocer un supuesto complot, consistente en la formación de un Bloque de Oposición Amplio (BOA), formado por los partidos políticos que no lo apoyan, empresarios, medios de comunicación, periodistas, intelectuales, etc. para tratar de sacarlo del poder.
Se deslindaron primero y se pitorrearon después de su BOA periodistas, intelectuales y otros, lo que causó una gran indignación del propagandista número 1 de AMLO Epigmenio Ibarra, lo que puso de manifiesto que fue Él quien ideó la supuesta estrategia de dicho Bloque de Oposición, aunque quedó documentado que quien plasmó el panfleto en el papel, fue el director de Comunicación Social de la SEGOB, Omar Cervantes.
Y lo peor (para AMLO) fue que no solo se pitorreó todo mundo de su BOA, no sólo hizo el ridículo, sino que si a alguno de quienes no aprueban su gobierno no se le había ocurrido cómo sacarlo del poder, les dio la idea de cómo hacerlo y ahora ya están en marcha los preparativos en ese sentido.
Me llegaron dos videos al respecto. El primero dirigido a los partidos políticos: PAN, MC, PRD y PRI que a la letra dice: “Este es un mensaje para la oposición en México, AMLO ya les hizo el favor de que nos los imaginemos unidos en su contra, ahora ustedes tienen que hacer de esa farsa una realidad, pero por favor sean inteligentes. Primero: alíense ya en favor de México, no en contra de AMLO; Segundo: comprométanse para ofrecernos un México más justo e incluyente con los más vulnerables, pero con honestidad, visión y capacidad; Tercero: absténganse de presentar candidatos que ya fueron rechazados en el 2018 (aquí presentan imágenes de José Antonio Meade, Felipe Calderón y Margarita Zavala), no queremos ver las caras de siempre; Cuarto: integren a la sociedad civil en las candidaturas, gente común, gente del pueblo (aquí debieron decir “a ciudadanos” en lugar de “gente del pueblo” para no seguirle el juego a López con su cantaleta del pueblo bueno) que esté dispuesta a colaborar con ustedes en salvar a México; Quinto: enfóquense en el debate público en temas substanciales: economía, salud, violencia y empleos, evitemos los distractores; Sexto: busquen liderazgos locales para que creen redes ciudadanas en sus ciudades, para discutir los temas en los que vamos mal y crear propuestas para solucionarlos. Recuerden, el futuro de México depende de ustedes, no de AMLO, demuestren que el país es más grande que sus intereses políticos inmediatos, en 2021 es la última oportunidad que tendrán para construir el México que todos queremos y donde todos cabemos”.
El otro está dirigido a los ciudadanos y dice: “Seis de cada diez mexicanos no vamos a votar por López Obrador, si tú eres de los cuatro que piensan votar por Él, este video no es para ti, deja de verlo y no lo compartas. Este video es para la verdadera mayoría de los mexicanos. Hay una manera de evitar que la locura, el miedo y la intolerancia se apoderen de nuestras vidas, son cuatro pasos: Primero: convence a un amigo o familiar indeciso para que no vote por López Obrador; Segundo: vota por quien pueda vencer a López Obrador, no importa quien sea, vota por el candidato que vaya en segundo lugar (después del de Morena, se entiende); Tercero: evita votar por el tercero o cuarto lugar, no desperdicies tu voto en quien no tiene oportunidad; Cuarto: comparte este mensaje entre tu familia y amigos, y todos tus grupos de WhatsApp, tarde o temprano te lo agradecerán. Tenemos que proteger a México del peligro de López Obrador, somos más y sabemos cómo hacerlo”.
Pues ahí están. Ya usted sabrá qué hacer con estos mensajes…
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