• Familiares de víctimas se desesperan
Familiares de personas desaparecidas y que están a la espera de resultados forenses de los restos óseos encontrados en predio de San José de Gracia, comienzan a perder la esperanza de tener resultados a la brevedad, ya que si bien la cantidad de huesos encontrados son muchos a lo largo de 64 lotes, el que sean tan pequeños hace que la labor de identificación sea aunque no imposible, bastante difícil.
Luego de cinco meses desde que la Fiscalía del Estado intervino el predio con un resultado final de 64 lotes con restos óseos, hasta el momento no se ha determinado si algunos de esos restos encontrados pertenecen a alguna de las personas desaparecidas en la Región Altos Sur.
Rosa Isela, fundadora del colectivo Altos Sur en Busca de Ti, fue quien pidió una y otra vez a la Fiscalía del Estado durante seis meses que interviniera el predio, tras una llamada anónima donde se le informó que los restos de su hijo Alberto Joel Polanco Vivanco, desaparecido desde el 11 de diciembre de 2019 en Tepatitlán de Morelos, podrían estar en el inmueble.
El 18 de febrero de este año, la Fiscalía comenzó las labores de búsqueda en el lugar, lo que le dio esperanza a Rosa de encontrar a su hijo, pero han pasado cinco meses y de acuerdo a lo informado por la dependencia estatal en la rueda de prensa del pasado 10 de junio, aún ni siquiera se sabe si los restos óseos pertenecen a humanos o a animales.
“Decepcionadas porque tuvimos la esperanza de encontrar, aunque sea algo. Un huesito o algo y pues las fechas que son y no nos dicen nada”, comentó Rosa Isela.
Al ver lo lento que ha sido el proceso de identificación, poco a poco, Rosa pierde la esperanza.
“Siendo realistas va a estar muy difícil una identificación rápida porque si teniendo cuerpos completos no logran identificarlos, ahora con pedacitos de huesos calcinados va a estar más difícil”, añadió.
María José es una de las 57 personas que conforman el colectivo y también tenía la esperanza de encontrar en el predio hallazgos de sus dos familiares desaparecidos; su padre quien fue levantado en su domicilio en el municipio de Lagos de Moreno el 23 de marzo de 2019 y su hermano desaparecido el 20 de octubre de 2020 en Tepatitlán.
“Pues va muy lento el proceso, yo sé que a lo mejor tienen mucho trabajo, tienen muchas cosas, pero si pusieran un poquito más de empeño ya nos dieran un poquito más de respuestas y no estuviéramos así”, confesó María José Gutiérrez, integrante del colectivo.
Ambas mujeres han visitado en cinco ocasiones las instalaciones del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, ubicadas en Tlaquepaque, con la finalidad de presionar para que se agilicen los trabajos de identificación, pero la autoridad no les ha brindado certeza sobre el avance del proceso.
Con información de Milenio.
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