Panorama

Habrá que cuidar el aguinaldo

Por Rubén Arias Barajas

Vaya para Ustedes el saludo semanal de costumbre.
Estamos a unos cuantos días de que termine el presente año y más vale estar muy prevenidos para los cuantiosos gastos que podrían presentarse con motivo del consumismo que tenemos tan inmerso ya en nuestra forma de ser y de vivir.

Habrá muchas tentaciones, pues ya los medios de comunicación están en pleno apogeo con el bombardeo de que compre esto o compre aquello, que regale mucho esta Navidad, los supuestos descuentos están a la orden del día, así como los planes para que compre ahorita y empiece a pagar hasta el próximo año.

El dinero de plástico, o sea, las tarjetas de crédito, tienen anuncios espectaculares y muy atractivos que nos invitan a usarlas con la promesa de ganar valiosos premios y de pagar muchas de las mercancías, por no decir que todas, a través de las propias tarjetas y no es fácil abstenerse o negarse a la tentación de endeudarse para enfrentar los compromisos de regalar a todos aquellos que son nuestros familiares o amigos.

Sin embargo, habrá que tener en cuenta que la situación económica de las mayorías, no es precisamente la más bonancible como para entrarle al juego del consumismo. Son muchos los que en este momento no tienen un empleo que les permita llevar a sus familias lo más indispensable para su supervivencia y por lo mismo el aguinaldo no lo verán ni siquiera en sueños.

Los propios comerciantes solamente tienen muchas esperanzas de tener buenas ventas, pero reconocen que esta temporada será muy difícil y que el consumo podría bajar considerablemente, porque hay mucha gente desempleada y aparte de ello, los que tienen trabajo, muchos de ellos están mal pagados y apenas pueden solventar sus necesidades más urgentes con el sueldo que devengan.

Por el lado de la Agricultura, las cosas no pintan mejores, pues los precios de los granos y otros productos, tienen bajos precios y por lo mismo, sus utilidades se verán reducidas, pues ya pasaron los tiempos del auge del agave, por lo menos en esta Región de Los Altos, donde los productores del mismo están metidos en serios problemas.

Y es que con las ganancias que obtuvieron cuando el precio del agave estaba a l7 ó l6 pesos, muchos de ellos compraron más planta y rentaron inclusive terrenos e invirtieron en plantaciones mucho más grandes con la legítima aspiración de tener otra temporada en donde fácilmente podrían tener muy elevadas ganancias.

Sin embargo, parece ser que casi todos pensaron lo mismo y son enormes las extensiones de terreno que fueron plantadas con el agave, lo que propició una enorme oferta del mismo que supera la demanda de los fabricantes del tequila, que originó una caída enorme en el precio de esta materia prima.

Hay gente que tiene cientos de miles de plantas en plena madurez y otros a punto de ello, que no encuentran la forma de que alguna fábrica les compre su producto y los pocos que lo han logrado, han vendido a precios irrisorios que les hace pensar que inclusive no recuperarán ni siquiera el costo de la planta, los cuidados que tuvieron con la misma a través de 7 u 8 años y los químicos y fertilizantes que tuvieron que utilizar.

Las ofertas de algunos fabricantes que han sido dadas a conocer a este servidor, son de pagarles a 35 centavos el kilo y fiado durante 6 ó 7 meses, lo que da una clara idea de lo devaluada que está dicha materia prima, por lo que no es de extrañarse que se vuelva otra vez a la época más reciente en la que hubo gente que tuvo que dejar que se pudriera el producto en extrema madurez y hasta pagar para sacarlo y desocupar las tierras para otros propósitos mejores y por ello, siendo una de las esperanzas más grandes de muchos agricultores, pues las noticias son muy malas en este sentido.

Habrá pues menos consumo, menos utilidades y ante la entrada del nuevo Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, vuelve a encenderse la esperanza de los mexicanos, igual que hace 6 años con Vicente Fox, de que se ataquen los males que aquejan a este País y que son la terrible inseguridad provocada por la delincuencia organizada, la falta de empleo, y apoyos a la Educación y otros rubros, que puedan reactivar no solamente la economía, sino también la confianza de los habitantes de México en un futuro mejor.

Deseemos suerte al Presidente Calderón, para que pueda llevar esta nave a buen puerto en beneficio de todos los que vivimos en este hermoso País.
Nos leeremos en la próxima entrega.