Después de prepararse espiritualmente por varias semanas, la niña Antonia de Jesús Vera Hernández llegó a la cada de Dios para recibir por primera vez la sagrada hostia.La niña es hija de los señores Hilario Vera y María de Jesús Hernández de Vera, fungiendo como madrina Teresa Vera.
Durante el evento, el presbítero oficiante le habló a la niña sobre el significado de la comunión y la invitó a seguir comulgando a través de los años, le señaló lo importante que es estar cerca de la casa de Dios y después de estas palabras le dio la sagrada hostia y la bendijo.
Al final de la ceremonia se ofreció una exquisita comida en una casa de campo ubicado en el crucero de Arandas.
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