Escuadrón de la Muerte
Estimado lector del 7 días: le platico algo de lo que está ocurriendo en el estado de Veracruz donde me encuentro, y donde la violencia que causa el narcotráfico está a la orden del día. La mañana de este martes, muy temprano, aparecieron tirados en la parte trasera de las instalaciones de Televisa Veracruz dos cadáveres, uno degollado y el otro asfixiado con una bolsa de plástico en la cabeza, los dos envueltos en colchas y atados. Al día siguiente, miércoles, publicamos el siguiente comentario en nuestra columna que también se llama Sumario en el Diario Política donde trabajamos:
Es cierto -decía el comentario- que el único lenguaje que parecen hablar y entender los matones es el de la violencia y las armas. Es cierto que deteniéndolos y metiéndolos a la cárcel no se regeneran, no tienen remedio y sólo se gasta el dinero de los impuestos en mantenerlos presos. Pero matarlos sin ser juzgados antes por un tribunal competente tampoco es la solución, ello equivaldría a vivir en una selva y bajo la ley de la selva o del más fuerte, y no en una sociedad bajo un estado de derecho.
Lo anterior porque hay indicios, sólo indicios, no elementos que permitan afirmarlo, que a los dos hombres que aparecieron ejecutados ayer en el Puerto de Veracruz pudieron haberlos matado policías, que si lo hicieron cometieron un delito igual al que están encargados de combatir.
"Lo que no hacen (normalmente) los ministerios públicos de este distrito que está a cargo de la Sub Procuraduría de Justicia al frente el licenciado Marco Antonio Aguilar Yunes... en menos de veinte minutos fueron levantados los cuerpos que aparecieron en la calle de Hipólito Deschamps, entre Díaz Mirón y Miguel Alemán", decía la información que sobre estos hechos publicó ayer (martes) el sitio gobernantes.com
"Ya estando en el Instituto de Medicina Forense -agrega gobernantes-, ubicado en Juan Pablo II y Reyes Heroles en el fraccionamiento Costa Verde, el licenciado Aguilar Yunes ordenó (que) se convirtiera en un búnker donde sólo podían entrar personal de (los servicios) Periciales, ministeriales y el que él permitiera su acceso".
Y añade que primero fue desenvuelto Víctor Manuel Pérez Rocha de 46 años de edad, que tenía su domicilio en Manzano 2429, fraccionamiento Framboyanes en Ciudad Victoria, Tamaulipas, quien presentaba una herida cortante en el cuello (fue degollado) y por esta razón aún escurría sangre. Luego fue desenvuelto Jesús Arano Servín, de 20 años de edad, quien según su credencial de elector vivía en Independencia 1513, barrio La Piragua en la congregación Juan Bautista municipio de Tuxtepec, Oaxaca. Este fue ahogado metiéndole una bolsa de nylon en la cabeza.
"El médico forense encontró en el cuerpo de este último una cartulina blanca que decía: "Esto les pasará a todos. Somos gente nueva. Le damos la bienvenida al Z-40". También se encontraron evidencias de que fueron torturados para arrancarles alguna confesión. Luego fueron prácticamente amortajados, es decir, les metieron trapo en la boca y les taparon los ojos con vendas".
Extraordinaria rapidez en el levantamiento de los cadáveres por parte de la autoridad; el acostumbrado hermetismo, vigilado estrictamente por la Subprocuraduría en las instalaciones del Instituto de Medicina Forense; uno de los muertos, el joven, asfixiado con una bolsa de plástico en la cabeza; y el mensaje en la cartulina, podrían ser indicios de que no fueron otros sicarios quienes los mataron. No es el estilo de la mafia, o no parece serlo hasta ahora, los narcotraficantes se matan a tiros, o más recientemente como ocurrió en Acapulco y en Michoacán, los decapitan totalmente, hasta ahora no se sabía de que mataran a alguien ahogándolo con una bolsa de plástico en la cabeza. ¿No querían matar al muchacho, sino sólo arrancarle mediante la tortura alguna información, y se les pasó la mano?? El periodista Miguel Angel López Velasco, del Diario Notiver, da otro dato: Cuando los patrulleros de la Policía Municipal acudieron a verificar de qué se trataba, descubrieron que se trataba de los cuerpos de dos personas envueltos uno en una colcha color azul con estampados floreados, y otro más en una colcha blanca, "con los pies cubiertos con una bolsa de plástico negra, similar a la utilizada por la SIEDO para cubrir a las personas que se llevaron detenidas la semana pasada".
En algunos países han funcionado en ocasiones los llamados escuadrones de la muerte, en Argentina y en Brasil por ejemplo, a veces para deshacerse de activistas políticos de oposición, a veces para combatir el crimen dando muerte a delincuentes, y en ocasiones simplemente para matar a alcohólicos de los llamados teporochos. ¿Hay un Escuadrón de la Muerte en Veracruz?, ¿quedaron vengados así los tres policías que fueron asesinados el domingo en Boca del Río?, ¿se asustará el Z-40 con el mensaje porque "esto les va a pasar a todos" y se alejará del territorio veracruzano?
Son preguntas que quizás no obtengan respuesta inmediata, pero que conforme se vayan presentando nuevos acontecimientos se estará en posibilidad de volverlas a hacer, o se descartará totalmente la sospecha de que pudieran haber sido policías los que dieron muerte a estas dos personas, que ciertamente no eran veracruzanos ni vivían en Veracruz, y muy probablemente pertenecían en efecto a alguna de las mafias del narcotráfico que se están disputando el territorio nacional, pero eso no legitima el haberles dado muerte sin ser juzgados antes.
Por el bien de todos, especialmente de los veracruzanos, ojalá y se descarte rápidamente esta hipótesis, porque en Veracruz hay un estado de derecho y leyes, y no debe imperar la de la selva.
Hasta aquí lo que decía el Sumario del miércoles. Ese mismo día por la mañana me llamó el gobernador de Veracruz Fidel Herrera Beltrán, extrañado por el comentario, porque externáramos ahí la sospecha de que pudiera tratarse de un Escuadrón de la Muerte, y nos dio una explicación acerca del origen de la muerte de los dos ensabanados.
Sin embargo ese mismo día por la noche, ya cerca de la media noche, Televisión Azteca transmitió un video en el que Víctor Manuel Pérez Rocha y Jesús Arano Servín aparecen siendo interrogados por alguien mientras son vigilados por cinco personas con uniformes negros, capuchas y armas de alto poder, el Escuadrón de la Muerte del que hablábamos, los detuvieron (o los "levantaron"), los interrogaron y luego los mataron.
En el Sumario que se publicó ayer en el Diario Política, en el que transcribimos el interrogatorio que se exhibió en el video, dijimos: "La pregunta es ahora quiénes integran dicho Escuadrón de la Muerte. Civiles no son, por supuesto, quienes los custodiaban mientras eran interrogados portaban uniformes negros, capuchas y armas largas. Los civiles, si no son narcotraficantes, no pueden portar ese tipo de armas. AFIs tampoco, no les habrían preguntado como les preguntaron si la Agencia Federal de Investigaciones colabora con ellos en Veracruz. Son, o sicarios de otro cártel, o gente del gobierno. Gente Nueva con métodos viejos, los mismos que se utilizaron en la guerra sucia de los años 70s para dar muerte o desaparecer a guerrilleros.
Y concluimos: No lo podemos permitir, nadie lo puede aprobar, excepto la mente enfermiza que concibió tal procedimiento y quienes acatan las órdenes de ponerlo en práctica.
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