Por Georgina González Ontiveros
Valle de Guadalupe, Jal.- Entre la policía municipal y las unidades de Protección Civil de los municipios vecinos es como se coordinan los operativos para atender las posibles contingencias que traigan las lluvias de este verano en el municipio de Valle de Guadalupe, pues aún no se cuenta con una unidad de Protección Civil propia.
Este pasado domingo 29 de julio se lanzó una alerta por el crecimiento del río que se encuentra en la cabecera municipal, junto al edificio de la Cruz Roja, debido a las fuertes lluvias de ese fin de semana, por lo que se inició un monitoreo por parte de la policía municipal para atender cualquier contingencia que pudiera haberse dado. Afortunadamente, la alerta no pasó a mayores y el nivel del río bajó, manteniéndose, cuando no hay lluvia, en un nivel que no entraña ningún riesgo para los habitantes de las cercanías.
Mandos de la corporación de Seguridad Pública de Valle de Guadalupe explicaron que cuando hay alerta por las lluvias, se coordinan con las unidades de Protección Civil de los municipios vecinos y del Estado para entrar en acción en el momento que se requiera, además de que se tienen listos albergues en el DIF y en una escuela, aunque no ha habido una inundación desde hace varios años.
Sin embargo, tanto los vecinos como las autoridades municipales están preparados. Cuando el nivel del agua llega a cierta medida, anotada en los escalones del auditorio municipal, se lanza la alerta y se procede a avisar a los habitantes para que se alisten a desalojar sus casas, en caso de ser necesario.
Es blanco de bromistas la Cruz Roja del Valle
Valle de Guadalupe, Jal.- No sólo falsas alarmas, sino hasta insultos tiene que soportar el personal de la Cruz Roja en Valle de Guadalupe, por parte de bromistas que ya los agarraron de clientes, llamándoles hasta seis veces diarias, sobre todo por las noches.
Don Raúl Jiménez Rodríguez, jefe de transporte, y la enfermera Julia González Barba reportaron que el problema de las llamadas de broma ya lleva mucho tiempo, pero no pueden señalar ningún responsable en concreto porque los bromistas llaman de teléfonos públicos, que a veces no quedan registrados en el identificador de llamadas.
Sin embargo, sí han logrado identificar a esos ociosos como muchachos de San Miguel el Alto o San Julián, pero lo más que se ha podido hacer es regañarlos cuando llaman.
Además de las falsas alarmas, reportando accidentes ficticios que cuestan tiempo y dinero a la Cruz Roja, los bromistas también se dedican a insultar a quienes contestan en la Benemérita, sobre todo por las noches.
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