Para protestas...
Cada vez que tengo la oportunidad de platicar con algún veracruzano, de los del pueblo, con el hijo de vecino, con el veracruzano común y corriente, no con los políticos profesionales sino con algún taxista, un bolero, un compañero de asiento en algún autobús, le pregunto acerca de sus gobernantes y de la política. En estos días, al regresar de un viaje muy largo que hicimos, la pregunta fue ¿cómo vio las pasadas elecciones del 2 de septiembre? Y las respuestas fueron coincidentes:
"Pues ganó el PRI por el trabajo del gobernador". "Tiene qué seguir trabajando duro para que deje de gobernador a quien él quiera". "Le gusta mucho ayudar a la gente, siempre que hay problemas como los que causan los huracanes ahí anda, cerca de la gente, por eso ganó su partido". "Pues... no hay más que él y Peña Nieto el del Estado de México, entre ellos dos se la van a rifar".
"El PAN trabajó en Veracruz -dijo el jarocho-, pero ya estaban robando más que los priistas. Ahora el PRI tiene qué trabajar más y robar menos para que puedan conservar el poder. Hay para todo, para que hagan obras y para que roben, pero que no sean tan descarados. Yo creo que entre el alcalde priísta y el gobernador van a hacer mucho por el puerto de Veracruz, porque se ve que Fidel Herrera quiere mucho a Veracruz".
¿Entonces -le preguntamos- los del PAN también salieron ratas?
"Todos son iguales, antes de que entrara el PAN nos salía en cincuenta pesos una infracción por pasarnos un alto, ahora nos cuesta trescientos, a ver si le bajan un poco ahora... y ¿no tumbaron el estadio de beisbol y el mercado de Pescadería para negociar esos terrenos...? Todos son de uña larga... y si llega a ganar el PRD va a ser lo mismo, no tienen remedio.
Nomás que unos ayudan a la gente y otros no, y la verdad este gobernador ha ayudado mucho a la gente, por eso ganó el PRI en todo el Estado".
Y... aunque no sean profesionales de la política, la mayoría de los veracruzanos son políticos, es éste un estado muy politizado en el que acaban de pasar las elecciones para diputados y alcaldes y ya están pensando en la de gobernador: "Ha trabajado mucho (Fidel Herrera Beltrán) pero tiene que seguir trabajando, ojalá y no le fallen los alcaldes y diputados de su partido que ganaron, para que pueda dejar de gobernador a quien él quiera..."
¿Y a él cómo lo ve usted... qué irá a hacer cuando termine?
"No pues ese cabrón si sigue trabajando así va a buscar la Presidencia de
la República, no tendría mejor candidato el PRI para tratar de sacar a los
panistas de ahí. Aunque dicen también que el del Estado de México, el Peña
Nieto ese también está haciendo buen papel, se la podría disputar, pero yo creo que en todo el país está ganando fama Fidel Herrera, aunque lo que pasa en el Estado de México tiene más resonancia, pero ya está saliendo Fidel en todos los noticieros también, ahora con esto de los huracanes ya sabe la gente que ayuda mucho a los damnificados y que está gobernando muy bien, y pues... lo del triunfo de su partido en todo el Estado ya se supo también, ya saben los priístas que sería un buen candidato para la grande. Creo que se la van a jugar entre los gobernadores de Veracruz y de México".
¿Y los que perdieron, los que no reconocen la derrota...?
"Que ya se dejen de jaladas... yo creo que los panistas tienen qué aprender a perder. Hay que reconocer que en esto de la política el PRI les lleva ventaja a todos los demás partidos, cuando el PAN va el PRI ya viene de regreso, los priístas ya aprendieron a perder".
Y se soltó el pelo, les apasiona la política a los veracruzanos: "Ya están como el chingao Peje ese que no sabe perder. Cuando ganan, a toda madre, pero cuando pierden hubo trampa. Yo creo que el Peje ya se volvió loco, mucha gente votó por él pero qué bueno que no ganó, imagínese... a un loco en la presidencia... ahí anda el pobre con su cuento de que es el presidente legítimo ¡coño! ni él se la cree, pobrecito... Y así están estos en Veracruz, panistas y convergentes y todos los que perdieron. Ya perdieron y ya, que se dejen de cábulas, no hay pa atrás..."
Eso opinan los veracruzanos con los que platicamos acerca de la política y de los partidos, y agregaríamos nosotros que los perdedores ni siquiera saben protestar, o no tienen seguidores suficientes para hacerlo, se plantan unos cuantos en la Plaza Lerdo de Xalapa, frente al Palacio de Gobierno, y creen que ya con eso basta. Para protestas en Argentina, a donde viajamos en días pasados y presenciamos una manifestación gigantesca en Buenos Aires y otra en Córdoba, la primera para protestar porque no aparece un activista que desapareció hace un año, y la segunda porque perdió su candidato a gobernador por unos cuantos votos de diferencia; y supimos de otras, multitudinarias también, en la provincia de Chaco donde quedaron casi empatados el candidato del Partido Justicialista (oficial) y el de los radicales.
Mucha gente... miles y miles de personas, llenaban cuadras y más cuadras de avenidas principales con pancartas, mantas enormes, música, tambores, cantos y consignas. Multitudinarias las manifestaciones pero muy ordenadas y así, demostrando la fuerza de su partido, pues... algunos consiguen que les hagan caso los tribunales electorales. Pero acá es puro rollo la protesta, pura impugnación infundada y declaraciones a la prensa. Si hubieran ganado donde dicen que ganaron sacarían a la multitud de simpatizantes a la calle, pero pues... ¿cuáles?
En fin... que al volver de Sudamérica nos encontramos con que el ciudadano común está conforme con los resultados electorales en Veracruz; con que la mayoría atribuye al trabajo del gobernador Fidel Herrera Beltrán el triunfo de su partido; con que ya está pensando la gente en quién lo podría relevar en la gubernatura cuando termine su mandato; y con que ya lo están candidateando para la grande.
Gracias cordobeses
Porque sé que van a leer esto en la edición virtual del 7 días en internet, damos las gracias aquí a las familias Bustamante y Fernández, de Córdoba, Argentina por todas las atenciones que tuvieron para mi familia y para un servidor. Gracias a todos, los Bustamante y los Fernández son una familia muy numerosa, cuyos miembros acudieron a la boda de mi hijo desde Jujuy en la frontera con Bolivia hasta Chubut en el sur ya cerca de la Antártida (a donde por cierto ya estaban llegando los pingüinos según las noticias), y por supuesto de la capital federal Buenos Aires. Todos nos trataron como si nos conocieran de toda la vida, especialmente César Bustamante, Estela Fernández y sus hijas Flavia Mariela y Sandra. Quedamos muy gratamente impresionados con la fiesta que organizaron y con las reuniones familiares en las que participamos. Y quién no... con esos asados, cordero, lechón y vinos... Los esperamos en México el año próximo, serán bienvenidos.
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