Tiene la palabra el Director

+ ¡Chíntolas! ¿y ahora qué hice...?

+ Aclara publicación Don Francisco

Por Fabiola González Ontiveros

La verdad esta vez no sé cómo empezar...

Bueno, siempre me cuesta trabajo empezar a escribir, pero esta vez por más que le exprimo al cerebro no se me ocurre nada, a ver qué sale...

Será tal vez que estoy demasiado preocupada por mi examen de física, porque como dijo el célebre Sócrates, yo sólo sé que no he cenado, perdón, que no sé nada; y que aunque estudie igual no voy a saber nada, para eso son las clases y trato de ponerles atención pero de cualquier manera divago, como el miércoles que estaba coloreando tranquilamente un dibujo muy extraño que hice, cuando el profesor (del que ni me daba por enterada que ahí estaba) me recordó que estábamos en clase de historia y me quitó mi dibujito.

Este semestre he descubierto que muchas veces no es el profesor, sino la materia. Con física, por ejemplo, nuestro profesor me cae muy bien y se le entienden a sus clases, pero yo no nací para la física y nomás no me entra.

Pero bueno, resulta que el martes pasado, bueno, el antepasado, mientras yo estaba en las oficinas del 7 días trabajando me habla mi mamá por teléfono para decirme: “oye, que te hablaron de la Prepa y como no te encontraron pues me dejaron el recado de que mañana fueras a hablar con el director”.

¡Chíntolas! ¿y ahora qué hice...? Me acordé de lo que había escrito hace dos semanas y pensé que eso podría tener algo que ver. Bueno… no, que de eso se iba a tratar el asunto. Pues ni modo, algo que no le habrá gustado supongo, y me lo ha de querer aclarar.

Así que el miércoles al finalizar la clase de química le pregunté al profe Jorge Horacio como a qué hora podía encontrar al director, y me dijo que no iba a estar porque había ido a Guadalajara y que toda la semana iba a estar yendo y viniendo.

Después de eso me dirigí a la Dirección a sabiendas de que a quien yo buscaba no iba a estar, pero para que no dijeran que me les ando escondiendo pregunté nuevamente si se encontraba el director y obtuve la misma respuesta. Le dejé el número de mi celular y mi nombre para que por favor le pasaran el recado de que sí había ido.

Pero ese mismo día -por ahí como de las 2 de la tarde- me llamaron nuevamente a la casa y me comunicaron directamente con nuestro director Francisco Acosta, quien me adelantó que quería hablar conmigo sobre mi publicación.

No me sorprendió, como yo no podía ir a la Prepa en la tarde y como el jueves no hubo clases por ser el Día del Maestro, me dijo que fuera a verlo el viernes, porque ese día sí hubo clases, lamentablemente para todos los que queríamos puente.

Por eso la semana pasada no escribí, porque iba a comentar sobre la cita con el director pero entre que no lo encontré y que me pegó una gastritis de tantos corajes que hago, pues se las quedé a deber.

El viernes regresé a la hora del receso como a las 9 de la mañana y me dijeron otra vez que no estaba, pero que iba a llegar como a las 10:30.

Regresé a dicha hora y cuando la secretaria volvió a preguntar mi nombre para avisar quién lo buscaba le dije que Fabiola González Ontiveros, la vez anterior me había detenido en González y en el 4°C y por eso supongo pensó que quería verlo por algún problema que tenía, pero esta vez al decirle el nombre completo me dijo: “Ah... tú eres a la que están buscando” y me invitó a sentarme y esperar. ¡Órale!

Nunca había entrado yo a la Dirección. Nunca había tenido a qué, las canchas y el área de los salones me los sé de memoria, pero la Dirección no la conocía.

En la media hora que estuve sentada esperando me fijé en todo lo que ahí había, me quedé observando el retrato de Benito Juárez y por alguna razón me quedé atrapada ahí, pensando que ser masón no le impidió ser buen presidente. No sé qué tiene que ver eso pero me sentí como que ya muy vieja pensando en esas cosas, a mí pregúntenme de música, de artistas… ¿pero de Benito Juárez...? Hasta me sorprendí yo solita.

Vi la planta que estaba ahí, toda grande y viva, así que por lo menos una planta pero ya vi que sí hay en la Prepa.

Me quedé con la mirada perdida hacia la ventana que da a las canchas, pensando que podría yo estar allá afuera, también perdiendo el tiempo pero al menos me estaría divirtiendo o platicando con mis amigas.

Jugué con los hilos de mi mochila, veía mis tenis -dándome cuenta de que les hace falta una lavadita-, pero nunca estuve nerviosa, el director no es de los que inspira miedo, se le nota la autoridad con el traje y las canas pero no es de los que trata a los alumnos con amenazas a través de miedo.

Por fin me pasaron, saludé al señor director y me senté, esta vez en frente de su escritorio y comenzó a hablar.

Me dijo que iba a felicitarme desde un principio cuando empecé a hacer mis pininos en esto del periodismo (ay sí, como si ya fuera una profesional...) y que por una cosa o por otra no había podido hacerlo.

¡Ajala! hasta me sentí importante... Luego me explicó el motivo de que yo estuviera ahí, que me iba a aclarar algunas cosas de lo que yo había escrito, y como no tenía mi escrito ahí a la mano pues, fácil, en la computadora se metió a la página del 7 días y rápido encontró mi crónica.

Me empezó a leer y me explicó que el Informe es principalmente para los meros meros, y que si invitaran a todos los alumnos dónde los iban a meter, que por eso no nos había invitado. Bueno.

Como mencioné también que arreglaron la Prepa me explicó que en efecto, que la Prepa se pinta dos veces al año, antes del Informe y de Juglarías, porque hay que dar el gatazo, y habló también de lo de las plantas, comentó que las pidieron prestadas lo cual no sabía yo.

Acerca de lo del viernes que había media Prepa afuera porque dijeron que sí iba a haber clases y luego salieron con que siempre no, me explicó también que la orden les llegó el jueves en la tarde y que no habían tenido modo de avisar.

Agregó que si la Prepa se me hacía chafa como está ahora debí haberla visto antes... Y que probablemente estaría en mucho mejores condiciones, pero que casi todo se lo están invirtiendo a la Prepa nueva, que ya no le quieren meter dinero a esta porque ellos esperan que ya para el próximo semestre nos van a mandar a la otra.

Yo nomás lo escuchaba. Desde que estaba en tercero de secundaria estoy oyendo que vamos a conocer la Prepa nueva... Me dijo que ya para el próximo semestre, a ver, porque del dicho al hecho…

Y pues básicamente eso, no recuerdo con exactitud todo, pero después de un rato me despidió y salí de su oficina, afuera de la cual ya lo estaban esperando algunos maestros. Y bajé las escaleras, ni expulsada, ni suspendida, es más, ni regañada. Hablando se entiende la gente.