El Cine Alteño

Por Juan Flores García

Sesenta y dos años hace de cuando en Tepa se inauguró un gran edificio, una sala de espectáculos, un cine, el gran Cine Alteño. Este cine fue edificado en nuestra perla de Los Altos, por iniciativa de la cadena de cines de Guadalajara, el “Circuito Montes”. Los señores Montes tenían en toda la república salas de cine.

Nuestro Cine Alteño fue orgullo de Los Altos. El terreno donde se edificó había sido propiedad del señor Leopoldo Franco, padre de nuestro amigo Polo hijo que en gloria esté. Dicho terreno tuvo un costo como de $30,000 de cuando aquel dinero tenía valor y el costo total debe haber sido como de un millón de pesos.

Tan sólo en la pintura de aquellos seis hermosos murales se invirtió bastante dinero. Estos fueron obra de aquel desconocido para los tepatitlenses, el gran muralista Francisco Muñoz.

En el interior del cine, al lado izquierdo, pintó el pórtico de nuestra parroquia y la calle Zaragoza, en otro El Salto de Juanacatlán, aquella cascada tan imponente que nos robaron quienes desviaron el cauce del Río Lerma, y enseguida el callejón del beso de Guanajuato. En el lado derecho estaba el mural de la panorámica de nuestra capital, Guadalajara, enseguida, el Popocatepetl, el cual duró seis meses pintándolo y el otro no recuerdo.

El administrador del cine lo fue por siempre don Toño, como cariñosamente lo llamábamos y no solamente lo administró, sino que también dirigió la construcción. Orgullosamente y con cariño, cuidó aquel monumental Cine Alteño, donde disfrutábamos aquellos miércoles populares que tan famosos fueron. En estos se pasaban películas para la familia. Con aquellos treinta centavos que en balcón o galería se pagaban, se disfrutaba de esas blancas “vistas” (así le llamábamos más allá).

El cine siempre estaba repleto de gente en estas funciones populares. Luego las matinés los domingos en la mañana, con aquellas “vistas” del Charro Negro y todas especiales para los chamacos. Así debe haber pasado unos veinte años exhibiendo todas aquellas películas mexicanas de cuando la época de oro del cine nacional. Luego a principios de los 70’s, viene la remodelación del cine, se tira todo aquello que fue arte. Criminalmente aquellos murales que por tantos años fueron admirados en esas paredes, se hicieron polvo. La obra del artista Francisco Muñoz fue borrada con el pico en la mano del hombre, que, golpe tras golpe, quitó de esas paredes tanta belleza.

Esta sala que tantas miles de veces, proporcionó diversión a los asistentes, adquirió otra fisonomía, el Cine Alteño, remozado siguió proporcionando esparcimiento a los aficionados al cine. Su personal lo constituían bellas personas, como doña Celsa Arias en la taquilla; la señorita Josefina “Chepa” Nájera, recibiendo los boletos a la entrada; en la dulcería la señorita Celia “Chela” Díaz. Las tres ya se nos adelantaron en el camino a la vida eterna.

Estaban también en la dulcería la señorita Amparo González, hoy la honorable esposa del tan conocido y buen amigo Toño Mora “El Foco”; la ahora esposa del también buen amigo Tino (el peluquero), la señora Gloria; también la señorita Socorro y algunas más que escapan de mi memoria.

Los operadores o “cácaros” fueron: Rosendo Gómez, Juventino Báez, “Tacho” Huerta, Pedro Torres (el sata), José López (el bigotes), que salía en aquella camioneta con equipo de sonido por las calles anunciando y repartiendo programas.

Así, por la pantalla del Cine Alteño, pasaron todas aquellas películas de los grandes artistas. Los hermanos Soler, Arturo de Córdova, Carlos López Moctezuma, Jorge Negrete, Cantinflas y el inolvidable Pedro Infante y tantos más acompañados de todas la bellas damas del cine nacional y a las cuales hoy vemos sólo en televisión.

Los tiempos cambian, borran la belleza de edificios, reducen el espacio, convierten en pequeñas las salas de cine y se les da otro tipo de espectáculo. Nuestro cine durante mucho tiempo sólo producía “basura”. Así de aquel monumental Cine Alteño, sólo queda el recuerdo, de su personal, unos que atendían y otros que proyectaban en la pantalla las películas de aquellos tiempos que tanto nos emocionaron y que no volverán y por eso decimos que así fue Tepa en el tiempo.

Publicar un comentario

1 Comentarios

  1. GRACIAS POR TAN BUEN REPORTAJE YA QUE TAMBIEN INCLUYERON A MI PADRE ROSENDO GOMEZ YA QUE MI FAMILIA FORMA PARTE DE LA HISTORIA DE ESTE MUNICIPIO

    ResponderBorrar