Prepotencia de los policías laguenses

Por Everardo Mora Ortiz

Exceso de fuerza y prepotencia se están dando en las Fiestas de Lagos de Moreno, ya que algunos elementos de Seguridad Pública de esta ciudad, abusan de los ciudadanos.

Me tocó constatarlo personalmente, en la visita que realicé a las instalaciones de la feria, ya que el pasado 31 de julio, por la noche, me encontraba conjuntamente con unos amigos y cuando me dirigía a la salida para abordar mi automóvil, nos encontramos que estaban muchos policías, diciéndonos con palabras altisonantes que desalojáramos aprisa, sin explicarnos por qué y uno de estos elementos, que pertenecen al G.E.R.R. (Grupo Especial de Rescate), de nombre Luis Eduardo Avilés, me sacó a empujones y gritándome una serie de improperios, por lo que yo le repliqué que le exigía respeto y me siguió empujando, haciéndome una llave (torcedura del brazo), sin ninguna razón, porque yo estaba siguiendo las instrucciones que ellos decían, por lo que me zafé de la misma y ante ello el Oficial solicitó refuerzos, sometiéndome entre 4 agentes y golpeándome el elemento Luis Eduardo Avilés, con el puño cerrado en el ojo izquierdo por varias veces.

Posteriormente me aventó contra la patrulla, bajo la tapa de atrás de la camioneta y me subió torciéndome los brazos con excesiva fuerza, ya cuando me tenían arriba me pateó 2 veces en el brazo y otras más en la cara, para luego pisarme el cuello con su pie derecho, diciéndome palabras ofensivas: “que si me la jugaba muy al machito y que si todo por este hijo de pe….”, después dijo: “volteen a este perro, porque no le quiero ver ni la cara”, teniéndome esposado hacia abajo, tirándome de patadas en las costillas y posteriormente se me subió en la espalda, saltando 4 veces sobre mi cuerpo.

Cuando me quejé, expresó: “ahora sí sientes, puto”, la verdad yo no pude ni oponer resistencia, cuando me llevaban en la patrulla, iban 2 policías adelante y 2 atrás, pero sólo el Agente Avilés era quien me agredía, y uno de los policías le decía que ya se calmara.

Cuando llegamos a la cárcel municipal yo expresé que me bajaba solo y golpeándome en las costillas me gritaba que más rápido, la dizque doctora que estaba de guardia, me pidió que pasara con ella para levantar el parte de lesiones, en este lugar me quitaron las esposas y traía las marcas de los aros en las canillas, incluso una de ellas me alcanzó a abrir en la mano derecha y al revisarme que traía un derrame en el ojo izquierdo por el golpe que me había dado el Agente Avilés, éste se acercó y comenzó a agredirme verbalmente, diciéndome que si era my gallito en contra de él, yo únicamente me le quede viendo y entonces me dijo textualmente: “chingas a tu madre” y me soltó un cabezazo en la cara, todos sus compañeros que estaban de guardia, le dijeron que ya estaba bien y fue hasta entonces cuando él se hizo para atrás y me empezó a decir que era cholo de la San Miguel de la Ciudad de León, Guanajuato y que lo que quisiera, que al cabo el me ganaba de todas, todas…

Ante esto yo me queje con la dizque doctora, expresándole: “ya vio usted lo que me está haciendo este elemento, Doctora”, a lo que ella dijo: “mire, yo no soy doctora”, y se suponía que era quien iba a dar el parte médico, entonces yo quisiera preguntar: ¿quiénes son los que están dando los partes médicos en las oficinas de Seguridad Publica?

Pues así son las cosas, de lo que está sucediendo en las instalaciones de la feria de nuestra Ciudad, así que si piensa ir a divertirse mejor antes piénselo, porque parece que tienen la consigna los elementos policíacos de buscar pleito, para después cobrar las multas correspondientes, como en mi caso que tan solo por mí, cobraron $400 pesos por dejarme salir de la cárcel; ante lo sucedido acudí ya la oficina Regional de Derechos Humanos a presentar mi queja, por lo que considero que fue una arbitrariedad y así mismo acudiré ante la Procuraduría Social del Ayuntamiento, para presentar mi denuncia correspondiente, porque así como me sucedió a mí, también le puede suceder a usted.

Finalmente quiero agradecerles por publicar mi artículo y pienso que como ciudadanos debemos defendernos, para que no queden impunes situaciones como la que me aconteció con el Agente de la Policía Municipal, Luis Eduardo Avilés.