La película de Chivas

Por Georgina González Ontiveros
Desde ESPNdeportes.com


Por una vez me dio gusto que hayan ganado las Chivas. ¿Por qué? Porque le aposté en la Quiniela Dulce y no cambié mis moneditas a pesar de saber que se habían quedado sin entrenador (como cuando "mataron" al comisionado Gordon a media película en Batman... yo sí me la creí) y porque así mis amigos y parientes chivas se les iba a olvidar burlarse de mí porque el Atlas perdió con un vergonzoso marcador de 1-4 (¿por qué Atlas, por queeeeeé?)

Y les aposté no porque esté renegando de mis principios rojinegros antichivas, tampoco porque estuviera en contra de las águilas, sino por solidaridad. Últimamente a los pobres rojiblancos les han pasado tantas cosas que ya los veo con algo de pena, como que no es justo que sufran tanta injusticia: tres entrenadores en un mes, el último con la enorme misión de imponer disciplina meses después de haberse agarrado a trancazos a un jugador de Estados Unidos cuando era auxiliar de Eriksson en el Tri; cinco partidos ganados de 14; una rechifla al jugar contra Lanús en la Santander Libertadores... lo que estos muchachos necesitan es una limpia en Catemaco.

Así como en las películas de acción uno se pregunta cómo va a salvarse el héroe, si no se le ve por dónde con tantos obstáculos en contra, así fue el partido de las Chivas del domingo. Ganaron y parece que el panorama les sonríe otra vez, para beneplácito de sus millones de aficionados y para el mío propio, únicamente por motivos de negocios, aclaro. Y aunque mis amigos americanistas me prohibieron hablar de fútbol nacional durante una semana, temo decirles que no puedo sustraerme de tan interesante tema aunque el Clásico en sí no haya sido tan emocionante como otros que he visto. Si las chivas ganaron el Clásico contra el América fue gracias a sus jugadores, porque dudo que Paco Ramírez haya hecho mucho más que recortarse su bien cuidada barba de candado en los tres días que tuvo para "preparar" el partido (hasta La Volpe esperó una jornada para dirigir al Atlas cuando lo contrataron hace unos meses). Y si las Chivas pueden ganar un Clásico a pesar de no tener entrenador y a pesar de las decisones precipitadas de Jorge Vergara y su reinita Angélica, entonces los tapatíos tienen potencial para lograr cualquier cosa. Me alegro (pero sólo por negocios, aclaro).

Felicitaciones a las Chivas y a mis amigos y parientes chivas, entre los que puedo contar a mis padres, mi hermano y sobre todo mis hermanas fanáticas, al lic. Peña, al Siniestro Dr. Quiróptero from Quiróptero Films Division (ah que nombrecito), a los genios editores de ESPNdeportes.com y a un montón más, y un abrazo para mis cuates americanistas, a quienes les quedan los Tecos para poder decir que le ganaron a un equipo tapatío.

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