Votar o no votar


Preguntaba la periodista Denise Maerker (a veces parecía preguntarle a sus invitados y otras parecía preguntarse a sí misma) si serviría de algo ir a votar el 5 de julio. Se le notaban las ganas de contestarse que no, o de que le contestaran que no, pero a lo primero no se atrevía y lo segundo nunca ocurrió, casi, pero los panelistas le daban muchos rodeos para no decir categóricamente que no. Se entiende que no se atreviera la conductora a manifestar claramente su opinión de que no vale la pena ir a votar, porque de hacerlo en un programa de televisión tan visto en cadena nacional, habría sido señalada como una irresponsable porque estaría induciendo (es una líder de opinión) al abstencionismo, a no cumplir con un deber cívico, lo cual no sé si además será un delito, pero de que no se la iba a acabar no cabe duda.

Después de Ella se empezaron a preguntar lo mismo otros periodistas como Sergio Sarmiento y este miércoles todos los más famosos de Televisa que participan en Tercer Grado. Ya hay toda una corriente en ese sentido, de votar o no votar...

En otras circunstancias, en otro tipo de elecciones sin duda que sirve de algo (y tal vez de mucho) ir a votar, por ejemplo para elegir al presidente municipal que es la autoridad más cercana a los ciudadanos, para elegir a un gobernador también, y para elegir al presidente de la República ya ni se diga, si no hubiéramos ido a votar todos los que lo hicimos en el 2006 en estos momentos estaríamos gobernados, tal vez, por el mentiroso y mañoso Roberto Madrazo que es uno de los lugartenientes del jefe de jefes Carlos Salinas, o peor aún, por el Hugo Peje Chávez mexicano que ya estaría reformando la constitución para reelegirse indefinidamente.

¿Pero... para elegir a los diputados?, ¿de qué sirve ir a votar para elegir diputados si éstos no representan a los intereses de la ciudadanía sino única y exclusivamente a los de su partido? Si la gente quiere que gasten menos en sus campañas, ellos reforman la ley para gastar más; si el común de los mortales mexicanos quisieran que por lo menos de su aguinaldo (los que lo reciben) no le cobraran impuestos, no pueden, los únicos que no pagan impuestos de eso son los diputados y senadores; todos los mexicanos quisieran ganar un poco más, pero si no les aumenta el sueldo su patrón o la empresa para la que trabajan, se joden, ni para protestar porque los corren, los únicos que se aumentan el sueldo (ya de por sí enorme) cada año son los diputados y sin medida, ganan lo que quieren; si nunca se paran por su distrito ni proponen ni aprueban las reformas y leyes que necesita el país, si no hacen nada de provecho durante tres años no importa, su partido los vuelve a lanzar de candidatos a una cámara o a la otra porque le son útiles por rastreros e incondicionales; si un ciudadano cualquiera pretende ser candidato independiente no puede, porque sólo los partidos tienen la facultad de registrarlos. Son una mafia.

Ya ni hacen campaña siquiera, no les interesa que los conozca la gente, mucho menos tratar de convencerla con propuestas diciéndole qué piensan hacer si ganan. En Tepa, por ejemplo, a los candidatos a la presidencia municipal sí los conoce la gente, pero de alrededor de veinte candidatos a diputados que hay en este distrito, locales y federales (de cinco partidos), 7 días les preguntó a 20 ciudadanos y no conocen a ninguno, no saben quiénes son ni los han visto en campaña.

¿Sirve de algo ir a votar el 5 de julio? En Veracruz no estoy tan seguro de que así sea, porque los que van a ganar y los que van a perder ya lo saben, unos por el trabajo que ha hecho quien los escogió, allá el gobernador es el partido y no tienen mayores problemas; y los otros porque sus dirigentes se han encargado de desmantelar a su partido. Por eso ni gastan en sus campañas, lo poco que les dan sus partidos se lo embolsan.

Pero no ir a votar tampoco sirve de nada, el abstencionismo les vale madre a los partidos políticos, si tuvieran un mínimo de conciencia quienes los manejan y dirigen podría ser éste un llamado de atención, pero les tiene sin cuidado. Sin embargo creo que ir a votar y anular la boleta sí les llamaría la atención, sería una forma de protestar y si lo hiciéramos muchos tal vez, tal vez... No estoy seguro, pero creo que es la mejor opción (para mí) y eso es lo que voy a hacer. Había pensado no ir a votar, pero de nada serviría tampoco, sería tanto como renunciar a todo derecho de elegir y dejar todo en manos de los nefastos partidos políticos. Recapacito, voy a votar el 5 de julio y anularé mi boleta.

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1 Comentarios

  1. yo voy a votar. pero voy a anularlo. no hay buenas propuestas. no hay buenos candidatos, y los diputados??? que se jodan. ya quisieramos muchos el sueldo de ellos...

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