suelto en Puente Calderón
+ Ya fue visto por el velador, soldados
y hasta elementos de Protección Civil
+ Creen que por eso algunos becerros
han desaparecido misteriosamente
Por Víctor Ontiveros Aguirre
Zapotlanejo, Jal.- "Al principio fueron sólo rumores", nos platica don Miguel Navarro Lomelí, velador de este lugar, "pero hoy en la mañana, me pegó un susto el cabrón; andaba yo lavando unos asadores junto al río y que oigo un ruidazo y al voltear, vi cómo aventó agua (el cocodrilo) a mas de un metro de altura y se escondió entre el lirio".
"Ya tenía varios días que una señora que vino de Guadalajara con su familia me dijo, 'oiga, tengan cuidado, acabamos de ver un cocodrilo que caminaba junto al río junto a la presa, si se descuidan se va a tragar un niño'. La verdad no le creí. Fui a ver, busqué y no vi nada".
"Después otra familia me volvió a comentar que había visto la cabezota del animal abajo del puente, pero no paró ahí la cosa; la semana pasada vinieron unos soldados a acampar, se quedaron a dormir por que estaban sembrando arbolitos en el parque, me dijeron que lo habían visto abajo del puente, yo les dije que por qué no le habían tirado de balazos y me dijeron que no, que hay que dejarlo en paz".
El domingo pasado el propio Basilio Macías, el encargado de Protección Civil, andaba por la noche retirando un panal de abejas que le habían reportado y le tocó a él y tres compañeros observar al animal sacar la cabeza, que según dijo, medía unos 60 centímetros, por lo que el resto del cuerpo será de mas de 2 metros de largo. Y el día que fue escrito este reportaje, 13 de octubre a las 11 de la mañana, fue cuando el velador del sitio notificó su encuentro cercano con este lagarto que ya tiene buen tamaño y es inquilino del espejo de agua de Puente Calderón.
Según don Miguel, este animal no es un cocodrilo como dicen, sino un caimán por la siguiente razón, el cocodrilo se la pasa por lo regular al borde del río y se interna en el agua cuando se ve amenazado o va por comida, y el caimán se mete al agua y ya no sale, se queda inmóvil, pero cuando le da hambre ni quien lo pare, por lo que es peligroso y es necesario tomar medidas sobre todo para que no vaya a ocurrir una desgracia.
Oficialmente el ayuntamiento solicitó ya un experto para que lo capture y lo lleve a algún lugar seguro. Aunque hay que reconocer que este animal está en su hábitat natural bajo el puente.
Los yacarés o caimanes son saurópsidos (reptiles) aligatóridos pertenecientes al género Caiman.
Se distribuyen en las regiones subtropicales y tropicales de América, desde México hasta el sur de Sudamérica.Se conocen tres especies del género Caimán.
Fueron cazados extensamentes durante décadas por su cuero, hoy se encuentran universalmente protegidos y en algunos casos industrializados en zoocriaderos. La alta frecuencia de reproducción —en comparación con otros caimánidos— ha permitido recuperar parcialmente las poblaciones, aunque las medidas de protección no se apliquen con el rigor deseable. Estas especies están registradas en el Apéndice II del listado de especies protegidas de CITES.
Cómo identifcarlo: Esta especie se identifica por lo corto y ancho del hocico, así como por los cuernecillos que tiene sobre los ojos. La hembra es más pequeña que el macho y llegan a medir hasta 2.5 metros.
Se localiza en la vertiente del Pacífico, desde el sur de Oaxaca hasta Honduras y en Colombia por ambas costas. Habita en zonas pantanosas y fangosas y abunda en lugares donde hay mucha vegetación como en los manglares, tolerando perfectamente las aguas salobres.
El cortejo inicia con la primavera y el apareamiento a finales de mayo y principios de julio. La hembra deposita de 30 a 40 huevos y el periodo de incubación es de 70 a 80 días.
Los adultos se alimentan de camarones, caracoles, langostinos, cangrejos y pequeños vertebrados y las crías de insectos acuáticos y cangrejos. Esta especie se encuentra sujeta a protección especial.
Tradicionalmente se le ha utilizado con fines alimenticios, medicinales, comerciales y como mascota. Actualmente en el estado de Chiapas se aprovechan produciendo pies de cría destinados a la repoblación de su hábitat, investigación y con fines comerciales (curtiduría, peletería y taxidermia).
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