Pórtico

Rebuscallas

Y él se representa a sí mismo…

Cumplida la estrategia de amolar al mismo de siempre porque es el que siempre trata de cumplir. Los diputados federales nos han dado una clara y contundente muestra que no sirven para nada, salvo para cobrar un jugoso sueldo cada mes, además de sus prebendas para “representar a sus distritos”.

Que los Diputados son unos holgazanes. Ya lo sabíamos.

Que son unos convenencieros. También lo sabíamos.

Que nunca cumplen lo que ofrecen en campaña. Lo requetesabíamos.

Ahora que los Diputados federales ya tienen paquete fiscal para el año entrante, me gustaría preguntarle al “representante de los alteños” ante esa Cámara: ¿Cómo nos puede explicar para qué quiere más dinero para Calderón y por qué votó a favor del IVA en 16%; por qué aceptó gravarnos hasta el Internet para las tareas de los estudiantes. Por qué, siendo ésta, “su región”, una cuenca tequilera de las más importantes del mundo, les da una estocada subiendo el IEPS; por qué, si este pueblo de “mojados” que los sostienen los depósitos de los hijos ausentes, ahora costará 3% si les mandas más de 15 mil pesos mensuales.

Claro, todas esas y unas cuantas preguntas más podríamos recetarle al legislador federal por este distrito. Ese que en campaña fue hasta el último rincón de los ranchos del Distrito para convencer que él sabía más que los otros sobre cómo resolver los problemas de nuestro pueblo.

Sumar su voto a la aplanadora mayoría, sin escuchar las necesidades de su pueblo, es un acto de grave desacato al mandato popular vía el voto que recibió el Diputado.

Me gustaría preguntarle, también, cómo piensa este diputado nuestro –porque a los otros no les puedo yo preguntar, viven muy lejos de esta tierra-, qué responderá a los tequileros de la zona cuando a partir de enero próximo tengan qué sacar dinero de sus inversiones para pagar más impuestos.

Me gustaría escuchar a nuestro diputado hablarles a los padres de familia que hacen un esfuerzo extraordinario por comprar una computadora, contratar Internet, rentar televisión por cable, comprar un amigo kit para comunicarse con sus hijos. Me gustaría mucho ver al diputado antes del 31 de diciembre haciendo reuniones públicas, en universidades, ante agrupaciones sociales, para que explique por qué levantó la mano para aplastar con su voto aún más a los mismos contribuyentes de siempre.

Preguntarle a él –a los otros diputados puedo no conocerles-, qué le motivó a levantar una mano para apretarle más la soga en el cogote a los contribuyentes y por qué la otra mano le tembló para meter en cintura (vía propuestas de reforma) a quienes no pagan un solo cinco de impuesto y se van por la economía informal.

Ya sé. Ya sé. La respuesta de nuestro diputado será que para eso el macizo Calderón proponía el 2% “para la pobreza” y que los demás no quisieron “atorarse” a todos, por ello, los sumisos y abnegados Diputados prefirieron atorar a los mismos de siempre, para que “todos” quedaran exentos del 2%.

Al pueblo sólo le quedaban de dos sopas: fideos y jodeos. Pero como los diputados tuvieron hambre porque votaron la iniciativa muy de madrugada, se “jambaron” los fideos. Al pueblo sólo le quedó de la otra sopa… Benditos nuestros legisladores.