Qué bueno

Qué bien que se haga deshecho el contrato por el cual un empresario era el concesionario del núcleo de feria de Tepabril; es de suponerse que traerá un beneficio a Tepatitlán, pues si no la autoridad municipal no le hubiera movido al asunto.

Que habrá que pagarse más de tres millones de pesos para anular dicho contrato, pero bueno, cada año se perdía y perdía dinero al hacer el balance de las cuentas de feria. Ahora lo que queda es organizar unas fiestas que no representen pérdidas.

También se espera que haya espectáculos de mejor calidad –Cecilia hasta habla de usar el núcleo durante todo el año y no nomás en tiempos de feria-. Se espera que mejoren las instalaciones de la feria, que si bien el concesionario que ya no lo es más, había hecho varios trabajos para mejorar la calidad de las instalaciones, era evidente que el núcleo aún tiene muchas áreas por mejorar, más que nada, desaparecer las extensiones de tierra que sólo afean e incomodan y hasta problemas de salud acarrean con tanto polvo que se levanta.

Mucho habrá que hacerse para mejorar los atractivos del núcleo de feria, como elevar la altura de los espectáculos, que el lugar sea un centro de reunión netamente familiar y no una cueva de malvivientes al que la gente normal no se atreve a ir.

Podría mejorarse el cartel del palenque y ofrecer unas instalaciones seguras. Si durante años los tepatitlenses pagaron el precio y llenaron el palenque para ver artistas de talla internacional, no es justo que en las últimas ediciones se haya llenado el programa con artistas de segunda y tercera, como si eso mereciera la gente.

Las instalaciones también deben mejorarse. Aún nadie se explica cómo Protección Civil, unos días antes de comenzar el palenque, haya elaborado una lista de los peligros potenciales de las instalaciones y aún así la empresa cuya cabeza visible en Tepatitlán es el empresario Alejandro Vázquez, haya obtenido la autorización para operar el palenque y haya jugado con la seguridad de los que ahí asistieron para observar el pobre cartel artístico que se presentó.

Aunque, el que se haya terminado la concesión del núcleo no implica que ahora sí se ofrecerá un buen palenque de gallos, pero esperemos que el espíritu renovador de este ayuntamiento alcance para también poner mano firme con el que vaya a ser el empresario artístico.

Qué bueno que se dio este cambio con lo del núcleo de feria. No deja de extrañar que con este ayuntamiento se hayan arreglado las cosas en tan poco tiempo, haciendo lo que los dos anteriores gobiernos panistas dijeron que no podían hacer.

Qué bueno que no hubo más complicaciones legales, demandas, dictámenes, estudios y millones de pesos tirados a la basura por tanto pleito. ¿Por qué Cecilia sí pudo en tan poco tiempo y los panistas no?