Manirrotos

Escuchando en San Juan de los Lagos, a los alcaldes de la Región Altos Norte. Los ediles se quejaban de que para entrarle a los programas de la SEDESOL, tuvieron que apoquinar con la lana que le correspondía poner al gobierno del Estado, pero que éste desde un principio dijo que no tenía, que con la pena...

Los municipios tuvieron y tienen que poner todo o gran parte que el Estado no quiso o no pudo dar y que si bien no es su obligación, sí es un compromiso, un pacto, cuando se trata de programas tripartitas de la Secretaría de Desarrollo Social.



El presidente de San Juan, fue más allá, pues agregó que en 2012 el panorama pintará peor, pues el gobierno estatal cerrará aún más la llave a los municipios con el pretexto de que ya no habrá cobro de tenencia y otras aportaciones de las que el Ejecutivo echaba mano para tener dinero.

San Juan de los Lagos, según Raúl de Alba, contará con 6 u 8 millones menos de presupuesto para el siguiente año; "a ver cómo le hacemos", dijo el primer edil.
Los alcaldes presentes en aquella reunión, todos panistas, no se la pensaron dos veces para señalar que Emilio nomás no quiso caerse con la lana, que ahí lo disculparan.
Pero el apriete del cinturón no se ve en todos lados, los Juegos Panamericanos son un barril sin fondo, el presupuesto a cada rato se queda corto y también a cada rato hay que inyectarle recursos y lo que falta.

Faltan varios estadios y complejos deportivos que todavía no terminan de construirse, aunque el dinero ya se haya acabado. Para acabar rápido y tenerlo todo listo antes de que inicien los juegos, es necesario contratar más trabajadores abrir más turnos de trabajo, dinero y más dinero.

El Gobierno del Estado dice a través de sus anuncios que las instalaciones panamericanas son "para ti, para tu familia". Falso, difícilmente alguien de Tepa, de San Juan, Ojuelos, de El Grullo o Colotlán irá hasta Guadalajara a practicar rugby, natación o esgrima, aprovechando que son de los jaliscienses los complejos deportivos tras celebrarse los Panamericanos.

¿Por qué beneficiar a unos cuantos deportistas extranjeros que estarán un par de semanas en Jalisco y descobijar a decenas o cientos de miles de jaliscienses que se van a quedar sin calles pavimentadas, unidades deportivas o un río no tan contaminado porque el Estado ya no tuvo dinero para esas obras?

Es cierto que nos echamos (¿echamos, Quimozabi?) el compromiso de hacer los Juegos Panamericanos, pero si estamos jodidos, ¿no hubiera sido mejor declinar y que otra ciudad de México o América gastara en organizar las competencias?

Pero lo bailado nadie nos lo quitará. El restaurantero, el vendedor de artesanías, el hotelero, el transportista, el guía de turistas, durante octubre verá una lanita extra en su bolsillo y después, lo mismo de siempre o nada y se acabó.

El gobierno debió ser más humilde, hacer como hizo Colombia en 1970, que de plano dijo que mejor fuera otro el que organizara el mundial de futbol, puesto que ellos no tenían dinero; de volada México levantó la mano y así nos convertimos en el único país que en dos años tuvo olimpiadas y un mundial.

Guadalajara, muy probablemente Jalisco y tal vez todo el país, tengan sus días de fama con los juegos continentales; después volveremos a la guerra contra el narco, los muertos y todas esas cosas por las que todo el mundo nos conoce ahora.

Y Dios quiera que no ocurra ninguna tragedia durante los juegos, por lo menos en Jalisco, porque entonces sí quedaremos pa`l perro con toda América y el resto del mundo y mucho cuidado si es algún atleta gringo la víctima, no nos la vamos a acabar...