Demandó a su esposa por fea

Una de las decisiones más importantes que una persona debe tomar en determinado momento de su vida es casarse con aquel hombre o mujer al cual considera el amor de su vida.

Desafortunadamente, muchas veces esa historia idílica poco a poco se va diluyendo y los problemas comienzan a aflorar. Los pleitos constantes no se hacen esperar y hay quienes deciden separarse, pues no encuentran otra manera de solucionar las cosas.

Infidelidad, diferencias irreconciliables, violencia, poco compromiso y no cumplir con las obligaciones de casa son algunas de las causales de divorcio aceptadas prácticamente por las legislaciones de todo el mundo. Pero, ¿habías escuchado que alguien acudiera ante las autoridades a demandar a su cónyuge por feo o fea?

Aunque suene absurdo, pijamasurf.com publica que en China, un señor llamado Jiat Feng dejó al lado todo el amor que sentía hacia su esposa y decidió presentar una demanda en contra de ella al sentirse víctima de un engaño.

Resulta ser que Feng llevaba un matrimonio estable de varios años con su esposa y como es normal en la mayoría de las parejas, deseaban convertirse en padres. Luego de intentarlo en varias ocasiones, finalmente la naturaleza los premió cuando la señora de Feng dio a luz a una niña.

Contrario a lo que todo mundo pudiera creer, la llegada de la pequeña desató la furia de Jiat, quien con el paso de los meses, se percató de que su hija en realidad no guardaba parecido ni a él ni a su mujer, e incluso a gente cercana a él les comentó que la bebé le parecía poco agraciada.

Este hecho desató la furia del hombre, quien de inmediato le exigió a su mujer una explicación del por qué la niña no se parecía en nada a ellos, algo que ella no pudo explicar, por lo que de inmediato, Jiat acudió ante las autoridades para levantar una demanda en contra de su señora, acusándola de infiel, indica elespectador.com.

Al ver que las cosas se habían salido de control, a la esposa de este hombre no le quedó de otra más que aceptar que a lo largo de su vida y antes de conocer a quien se convirtió en su marido, había ingresado en varias ocasiones al quirófano para someterse a varias cirugías plásticas y así mejorar su aspecto, operaciones en las que había gastado más de 100 mil dólares y que la habían dejado totalmente distinta a como en realidad era.

Aunque en un principio su esposo no le creyó, finalmente todo quedó comprobado gracias a fotografías antiguas de la mujer, en donde pudo apreciar cuál era su verdadera fisonomía y anatomía y que en realidad, su hija se parecía a ella.

Aún así y como dice lanacion.cl, Feng decidió proceder en contra de la madre de su único retoño, iniciando un proceso de divorcio, cuya causa principal era la fealdad de ella y la responsabilidad de que su hija no fuera tan agraciada. Las autoridades fallaron a favor de este hombre, quien deberá ser indemnizado por su ex mujer por un poco más de 120 mil dólares.