Aduana

Dime con quien andas y te diré cómo gobiernas…

 El apretado triunfo de Jorge Eduardo González Arana en Tepa, le debe obligar a él y a su equipo, a entender las entrelíneas de los electores.

 Nunca hubo un resultado tan estrecho. Nunca hubo una participación igual de la población (en cantidad).

 Ya hubo alternancia en Tepa y fue muy buena para los habitantes de colonias que, de pronto, vieron cómo sí fue posible, cambiando partidos en el poder, alcanzar los beneficios de un pavimento, de una banqueta, de una lámpara, de una escuela, de un camino rural.

 La alternancia trajo muchos beneficios a Tepa, allá en los años ochentas del Siglo pasado.

 A Jorge Eduardo le debe quedar claro que el voto mayoritario le permitirá ahora gobernar a una sociedad muy compleja, que vive en el municipio con mejor economía global, pero con minisalarios a sus trabajadores.

 El panista gobernará sí con el triunfo legítimo, pero con una oposición real del 60 por ciento de los electores que hubieran preferido a alguien más (Manolo o Nena), pero que, en el plano real, apenas votó por él 1 de cada 5 mayores de 18 años del municipio (20 mil votos de casi 100 mil electores con credencial del IFE).

 El triunfo de Jorge fue, en mucho, gracias al castigo emitido a la alcaldesa con licencia, por tanto, Jorge debe saber leer que, para gobernar y dejar contento al pueblo, además de atender más y mejor a los vecinos del municipio, deberá aplicar mejores estrategias de comunicación, más sensibilidad ante los tepatitlenses y más rápida respuesta ante los reclamos ciudadanos.

 Esta semana Jorge Eduardo anunció a dos de sus hombres de confianza en la próxima administración, Rigoberto “Chachín” González, en Participación Ciudadana (con miras al 2015) y a César Martínez (Primo de Los Pumas) en Educación y Cultura.

 No lo ha dicho, pero es un hecho que seguirán en la nómina, ahora sí con “todo el poder”, los actuales Regidores encabezados por Arturo Pérez Martínez, a quienes se les acusa de cerrazón y falta de actitud para atender los temas del municipio en esta administración.

 En esos dos escenarios, es donde Jorge tendrá sus dos mayores retos del trienio: establecer una relación cordial con los ciudadanos y, a su vez, desmarcarse de los lastres panistas que a la gente no le agradó dejar más en el poder de los últimos años, reflejado en el triunfo, hace tres años, del priísmo con Cecilia González.

 Los tepatitlenses no se miden al castigar a los que considera malos gobernantes. Los tepatitlenses buscan hacer efectivo su sentimiento hacia el poder civil a través del sufragio.

 Por ello decimos que Jorge ya ganó la elección, se convertirá en uno de los alcaldes más jóvenes de Tepa, pero también, tendrá enfrente a gobiernos priístas, a ciudanos hartos de malos tratos (de panistas y de priístas) y por esas razones deberá ser cuidadoso al darle nombramientos a sus militantes albiazules a partir del mes de septiembre próximo.

 El riesgo es que se le cobre a Jorge la cuota por acomodar a los lastres panistas, de nuevo, en la nómina municipal.

 De eso, el pueblo está cansado.

 Con los nombramientos, deberá el próximo alcalde, entregar una guía se humildad, de sensibilidad y de competencia, para que no les vuelvan a dar una patada en el trasero en la siguiente elección constitucional.

 Ahora le toca a Jorge comenzar a dar resultados y, con los nombramientos, comienza a hacer su tarea. Es la primera aduana.