Simbolizados

Llegó la hora macabrona de los diputados

 Bajo el espíritu Republicano de nuestro país, hay momentos donde la separación de poderes queda (debería quedar) manifiesta. Son esos momentos de definición los que permiten reflejar los talentos y las capacidades de quienes, algún día, se dijeron nuestros representantes.

 Al Ejecutivo le toca hacer, ordenar (estructurar) y atender las necesidades sociales de los gobernados. Y lo debe hacer apegado a lo que la Norma le dicte. Ni más, ni menos.

 Al Legislativo le toca hacer las leyes, la Norma, para que alguien más la ejecute.

 En esa lógica del poder, que a veces es la menos lógica, tenemos qué preguntarles a nuestros diputados qué piensan de las llamadas Reformas estructurales que ahora analizan.

 La gran mayoría de la opinión pública ha dirigido su lanza contra Peña Nieto. En parte tiene razón la gente en cuestionar y hasta mentar madres contra el Ejecutivo por lo que ha propuesto. Pero hemos dejado ir en blanco a los diputados, a los que hacen normas, en quienes descansa la trascendental e histórica responsabilidad de aceptar, rechazar o modificar las iniciativas de ley o de reforma.

 Y si el resto del año sólo se pasean, se presumen, se levantan el cuello; los diputados, en específico, los federales, en este momento deberían estar echándose clavados entre la gente para preguntarle al pueblo qué opina, qué quiere, qué piensa de las reformas.

 Ya después de septiembre y de octubre, cuando los tiempos caducaron, cuando ya se aprobaron los cambios a las leyes, ya después para qué queremos ver a los diputados, para qué sirven sus vueltas al pueblo, si ya nos hincaron, nos perjudicaron y nos pusieron una mezcla homogénea de hidrocarburos saturados (vaselina). Nos dejan, a partir de cada noviembre, servidos a la mesa de las contribuciones, sin más nada que agua…ntarse.

 Pero en estos momentos, cuando “se discuten” las reformas en el Congreso de la Unión, no veo, no escucho a los dos diputados que “tiene” el Distrito 3 de Jalisco entre su pueblo. Tal vez platiquen con sus bancadas, con sus líderes de partido, pero hasta ahora no he sabido de foros, consultas o reuniones donde se les pregunte a los padres de familia qué les parece el IVA en Colegiaturas. Tampoco veo a la tepatitlense y al arandense sentados con los Contadores, ni con los Arquitectos, ni con Constructores, ni con los joyeros o los refresqueros.

 ¿A quién van a representar cuando antes del 20 de octubre voten las Reformas Hacendaria, la Reforma energética y las otras?

 Cuando alcen su mano, allá donde son 500, ¿cuántas firmas de los pobladores de este distrito les respaldarán ese voto?

 Peña Nieto se pasó con sus propuestas. Pero él no es el único con poder, con representación. Para eso tenemos al Republicano Poder Legislativo, éste tiene la última palabra.

 Como dijera el enmarihuanado expresidente Fox: “el Ejecutivo propone y el Legislativo dispone”.

 Ya vendrá Noviembre 2013, y en ese momento, sabremos de qué están hechos nuestros diputados federales, “los que nos representan”.