Vaya para Ustedes el saludo semanal de
costumbre.
Parece ser que nosotros los mexicanos
moriremos con nuestra forma de ser. Qué difícil resulta que cambiemos nuestras
formas de actuar, salvo que sea copiar costumbres de nuestros vecinos los
gringos, por lo demás siempre dejamos todo para el último momento y a veces ni
eso, pues solamente nos arrepentimos de no haber actuado a tiempo.
Traigo esto a colación, porque si uno se
pone a analizar las circunstancias que nos rodean, más valdría que a nuestro
presupuesto de gastos inevitables o muy necesarios, se contemplara el adquirir
una o varias pólizas de seguros.
Los daños cuantiosísimos que se sufrieron
en el País por causa de los eventos Hidro-Meteorológicos llamados Manuel e
Ingrid, nos dan a conocer no solo la tremenda fuerza de la naturaleza sino
también nuestra incapacidad para manejarnos por nosotros mismos, con nuestros
propios recursos, para solucionar los daños causados.
Si de circular en su vehículo se trata,
el obtener una póliza de seguro para proteger varios o el único vehículo que
con dificultades se pudo conseguir, más vale que tengamos dicha póliza aunque
sea para cubrir los daños a terceros. Resulta que en las lamentables
condiciones en que se encuentran nuestras carreteras, la posibilidad de tener
un accidente es muy elevada.
Ahora que, si solamente resultaran
dañados los vehículos, pues ya sería ganancia, pero generalmente los accidentes
de tránsito traen consigo lesiones cuyo costo de atención es muy elevado. Y qué
decir, si es que muere una o varias personas. Entonces hay que enfrentarse a
gastos elevadísimos y además el riesgo de ir a parar a la cárcel.
El robo es otro motivo para protegerse.
Su vehículo puede ser víctima de los amantes de lo ajeno y lo pueden dejar a
pié tanto en la ciudad Capital como en cualquiera de los pueblos de ésta zona
de Los Altos. Si el robo fue cuando usted lo dejó estacionado por ahí en el día
o por la noche, considérese afortunado, pues son frecuentes los robos de
vehículos cuando Usted está conduciéndolo y a veces la violencia no se hace
esperar con motivo de una mala reacción que se pueda tener para tratar de
evitar el robo. Las estadísticas que se dan a conocer, hablan de miles de
vehículos que son robados cada año.
El robo a casa habitación, es otro delito
que se comete cada día con más frecuencia y ahí también es deseable que no se
encuentre nadie en la casa si es que es visitada por los ladrones, porque el
resultado podría ser peor.
El seguro de vida, es otra alternativa
muy importante. Resulta y usted amigo lector lo sabe bien, que morirse resulta
bastante caro también. Los gastos del “estuche” y funerarios en general, suelen
ser elevados y a veces nos pueden tomar por sorpresa. El problema mayor es
dejar a la familia sin su presencia pero también con la delicada tarea de
enfrentar los gastos del sepelio.
Perder la salud, es algo que seguramente
va a ocurrir un día. Si usted siente la seguridad de contar con su afiliación
al ISSSTE, IMSS, o cualquier otro
sistema de atención a la salud, ya sabe que tiene que enfermarse en día y
horario hábiles (por lo menos eso ocurre aquí en Arandas, aunque Usted no lo
crea) pues por más que sea una emergencia, hay horarios en los que no habrá
nadie para atenderlo sin importar la gravedad de su asunto, así de terrible es
la verdad.
Si tiene Usted sus ahorros y esperanzas
puestas en que tendrá una buena cosecha, ya puede Usted ir tomando previsiones,
porque la presencia de un ciclón, pueden hacerlo despertar abruptamente de su
sueño y enfrentar la pesadilla de un desastre y no solamente no tener ganancias
de un inversión, sino enfrentar pérdidas por lo que sembró.
Se fija Usted pues amigo lector que tal
vez valdría la pena pensar con toda seriedad en protegerse ANTES y no
lamentarse después de ocurrido alguno de éstos eventos de los que le hablo?.
Dice un comercial muy conocido en el Pais vecino del Norte: “Más vale tener un
seguro y no necesitarlo, que necesitarlo y no tenerlo”. Es una contundente
verdad.
Para finalizar le aclaro que no
represento ni estoy contratado por comisión a ninguna compañía aseguradora.
Solamente es una reflexión que se me vino a la mente, me parece constructivo y
útil pensar en ella y se la comparto en ésta mi colaboración con la mejor de
las intenciones. Total, hay que prevenirse cuando se puede, ¿no?.
Nos leeremos en la próxima entrega.
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