Adinerados

Se irán con las manos vacías, pero…

 Ya terminaron las fiestas.

Ya se cumplieron las metas de unos y las de otros.

 El que quiso se divirtió, el que no, pues, no.

 Habrá comentarios de todo tipo sobre la feria y cada uno de esos comentarios deberán ser respetados, pues, una vez más, cada quien hablará según le fue en la feriabril.

 Con este fin de semana –largo, ya que termina el lunes 5 de mayo-, se cierra el telón de la pachanga.

 Los organizadores de la Expo Ganadera darán, si quieren, su informe a sus asociados.

 Los del palenque sabrán si valió la pena repetir el cartel e incluirle algo de pop-rock.

Jaime Rodríguez podrá anunciar su éxito personal que significó darle “a cada quien un evento para su gusto”, hasta el sector Lésbico-Gay fue apoyado por la autoridad con su terraza en el Núcleo; o los adolescentes que fueron a embriagarse con el komander.

 Con el cierre de estas fiestas abrileñas habrá un nuevo ciclo.

 No sólo porque ya llegó mayo y hay que ir preparando las fiestas septembrinas. No.

 El nuevo ciclo es porque este año concluyen las concesiones. Esos negocios que repartieron los panistas de hace 10 años para que unos cuantos –incluidos ellos- se llenaran los bolsillos.

 Al terminar esta edición de la feriabril, las autoridades tendrán que ir pensando en qué harán con esos espacios del Núcleo, también llamado Parque Bicentenario.

 Ni priístas ni panistas –tradicionalistas o yunquistas- pudieron en 10 años, demostrar su visión. Se limitaron a explotar económicamente sus facultades consagradas en la Ley de Servidores Públicos y en el 115 Constitucional. Entregaron terreno, infraestructura y oportunidad de embriagar a la población a cambio de unos cuantos millones de pesos. Dinero que, como todo mal habido, no rindió.

 Lamentablemente ya suenan los rumores de que, al término de las concesiones del palenque, de las tequileras, de las cervecerías y de las refresqueras (las terrazas las “rescató” Cecilia González), se están frotando las manos los actuales regidores y uno que otro funcionario o familiar de los panistas.

 Se habla de que podrían volver a entregar las concesiones del Palenque al mismo grupo, pero a donde invitarían, con un prestanombres, al tesorero municipal.

 Se habla también de que ya corrieron los personeros de los Pérez Martínez para quedarse, otra vez (originalmente ellos se quedaron con las terrazas hace 10 años) con la explotación de espacios para embriagarse dentro del Núcleo.

 Se hablan de muchas versiones que, si el alcalde quiere, podrá desmentir lanzando convocatorias abiertas y públicas, convocando a sectores sociales dignos de fe para que den testimonio y transparencia a este nuevo proceso.

 También tienen la posibilidad de ya no más entregar el patrimonio de los tepatitlenses y administrarlo como Dios manda, que para eso fueron electos.

 En fin, los panistas tienen la oportunidad histórica, otra vez, de relanzar un gran proyecto de negocios regionales a través de los pabellones que ofrece el terreno del núcleo.

 Lamentablemente el fantasma de la opacidad, de los negocios oscuritos, vuelve para quedarse.

 Así veríamos que el actual Ayuntamiento se iría, en un año más, con las manos vacías… pero con los bolsillos llenos,  gracias, otra vez, a la feriabril. Porque hasta el Komander les ayudó a ganar dinero este año. Visión economicista, pues. Dinero, maldito dinero…