Vaya para Ustedes el saludo semanal de costumbre.
Este jueves 26 de Julio, se frustró la importante visita programada para las 9 de la mañana, del actual Delegado Estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social, a la añeja Clínica Familiar de Arandas, que se había anunciado con varios días de anticipación.
Mucha gente se mostró satisfecha por la noticia de la visita del funcionario a dicha instalación, debido a los múltiples problemas que aquejan a los usuarios que requieren o han requerido de los servicios de esta clínica familiar, porque pretendían exponer sus desacuerdos y la satisfacción de sus necesidades impostergables, pero de última hora el miércoles por la noche se supo por aviso dado al señor Alfonso Hernandez Fonseca, activista social que ha querido representar a los quejosos ante dicha Institución.
Y es que no es para menos y a continuación enlisto algunas de las cuestiones que se pretendía plantearle al mencionado funcionario Doctor Marcelo Castillero, con el ánimo de obtener su valiosa intervención y gestión para aliviar los males que aquejan a esta pequeña y añeja clínica que resulta a todas luces poco funcional en relación con la demanda que tiene.
Por ejemplo: La clínica tiene aproximadamente 40 años de antigüedad y está instalada en un terreno de aproximadamente 6 mil metros cuadrados con amplios jardines y espacios para estacionamiento, pero sus instalaciones físicas fueron construidas hace muchos años y ocupan cuando mucho mil metros cuadrados.
Tiene inscritos como derecho-habientes a quienes debe prestar todo tipo de atenciones, a cerca de 40 mil personas no solo de Arandas, sino también de sus delegaciones.
Pero para cumplir con su cometido, tiene escaso personal administrativo, de intendencia, seguridad y de médicos y enfermeras.
Cuenta con solamente 3 o 4 camas para tener temporalmente a personas que ameriten hospitalización.
No cuenta con laboratorio de análisis y cuando se necesita de ellos, que es en la mayoría de las ocasiones, se toman las muestras de sangre y fluidos, citando a la gente a las 5 de la mañana para hacer interminables filas con las consecuentes incomodidades del clima a esa hora y la falta de espacio cómodo para esperar turno.
Se cuenta con solamente 3 consultorios para atender a miles de pacientes y obviamente el número de profesionistas se ven súper saturados de trabajo y aún cuando hagan su mejor esfuerzo, por supuesto que no alcanzan a atender a todos los que lo necesitan.
No existe aparato de rayos X para tomar las radiografías necesarias para el diagnóstico de fracturas u otro tipo de problemas.
Para casi todos los casos de importancia, se tiene que enviar a los pacientes a la vecina ciudad de Tepatitlán, en donde también ya empiezan a sentirse los efectos de la saturación debido a que cuando se gestiona cita con especialistas, ésta se programa para meses adelante.
Por lo que se refiere a los medicamentos, es muy raro que las personas vean surtidas sus recetas con los medicamentos que les fueron prescritos por los médicos que les atendieron y tienen que dar vueltas y vueltas durante semanas para poder, si tiene suerte, tener surtida completamente su receta.
En cuanto a la atención al público, resulta que aunque parezca increíble, estaba prohibido enfermarse gravemente o tener una situación de salud que requiriera ser llevado a emergencias los domingos, porque no había servicio de emergencias ese día. Persiste hasta el momento, según nos fue informado, que entre las 2 y las 4 de la tarde no debe Usted requerir los servicios de emergencia porque no hay quien le atienda.
Parece increíble todo lo que aquí narro, pero si vive en Arandas o en los sitios de alrededor a quienes les corresponde acudir a esta clínica, podrá ser víctima de las carencias que menciono con anterioridad.
Es justo aclarar también que de muy poco de lo que sucede, se puede culpar al personal de esta clínica, pues las limitaciones y carencias que presentan, no son atribuibles a su responsabilidad.
Por ello, toca pues a “los de arriba” el buscar la solución a problemas de salud que muchas de las veces son impostergables y se espera entonces que en fecha próxima o cercana, se pueda llevar a cabo ahora si la visita del Delegado Estatal para que se entere y corrobore con su presencia las graves carencias y dificultades que tiene el personal para atender debidamente a los derecho-habientes.
Hay cosas que se pueden dejar para después, pero con la salud de los arandeses derecho-habientes, no se puede jugar (con los de nadie, pero en este caso específicamente nos referimos a ellos) pues recuérdese que en su gran mayoría, son personas de escasos recursos que no pueden recurrir a consultas particulares ni a adquirir los carísimos medicamentos que necesitan para paliar su problemas de salud o recuperar la misma.
Solo en un país surrealista como el nuestro sucede que se pague un servicio por adelantado por si alguna vez se le ofrece usarlo y cuando esto ocurre, no se lo pueden dar, o se lo dan a medias… No se vale. Tenemos que ingresar ya al primer mundo y darle atención prioritaria a asuntos de la salud.
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