La cultura del lodo y el insulto


Por Gustavo González Godina


Esta semana me encontré con dos publicaciones en las redes sociales, que me llamaron la atención y me acabaron de convencer de que en éstas hay la más absoluta libertad de expresión. Lo mismo sirven para reconocer, felicitar, agradecer y apoyar, que para criticar, denostar, difamar, ofender e insultar cobardemente y con total impunidad a gente que ni conoce personalmente el que insulta y ofende.


La primera fue la cantidad de comentarios que provocó la noticia de que la señora María Elena de Anda va por la reelección como presidente municipal de Tepatitlán; y la segunda una mentira tratando de desorientar a los simpatizantes de la candidatura independiente al mismo cargo del licenciado Ramón González González, lo que de momento causó algún desconcierto (lo que era el objetivo) pero que poco más tarde el propio candidato se encargó de desmentir.


Acerca de la primera, de la cantidad de comentarios a favor y en contra de la postulación de la Señora de Anda buscando repetir en el cargo (más de 300 comentarios entre el domingo y el lunes), me dicen a mí tres cosas, una, que las redes sociales del Semanario 7 días tienen muchos visitantes, lectores y participantes que interactúan con el periódico; dos, que el tema de la reelección es muy polémico y que desató los rencores acumulados y el entusiasta apoyo de sus simpatizantes; y tres, que la candidatura de la Señora no es tan débil como yo pensaba sino todo lo contrario, llegará con fuerza para darles la pelea a los demás candidatos, especialmente a uno de ellos.


Por los antecedentes recientes, en el caso de la señora María Elena de Anda en las redes sociales, todo mundo se imaginaba que su candidatura, de darse, estaría destinada al fracaso; nadie hablaba bien de Ella, sólo había detractores hablando de lo que supuestamente se ha estado robando del municipio, obviamente sin tener ninguna prueba al respecto, se trataba sólo de difamarla y lo venían logrando, le crearon una imagen tan negativa, que a cuantas personas que les comenté la posible candidatura a reelegirse, me contestaron “no gana”. Ya me estaban convenciendo.


Pero curiosamente, en cuanto se publicó la noticia de que oficialmente va como candidata a la alcaldía, le llovieron los comentarios de apoyo, de felicitación y en general muy positivos. Ahí mismo se dio la respuesta, de que dichos comentarios favorables y hasta elogiosos eran de personas que trabajan en el ayuntamiento, y de militantes de Movimiento Ciudadano, agrego yo. Y pregunto: ¿y qué las personas que trabajan en el ayuntamiento y que militan en MC no votan? Claro que votan y no sólo ellas, sino sus familiares y amigos, lo que representa un considerable número de votos por la Señora.


En contraparte, o en contrapartida, quienes desde hace algún tiempo vienen criticando por todo a la Alcaldesa, con la noticia de su postulación se exacerbó su anti nenismo y profirieron insultos y ofensas sin medida, como si el hecho de tratarse de una persona pública les diera derecho a insultarla de esa manera. Esto tiene que ver con la otra publicación que me encontré, ésta en el Whatsapp, una mentira que sólo se explica por los tiempos electorales en que vivimos. Tal parece que somos parte de una cultura de la mentira y del insulto cuando hay elecciones, lo primero y lo mínimo es la descalificación, pero a ésta le sigue la difamación y el denuesto.


Hubo ofensas tan reprobables como la expresión “vieja puta gorda y rata”, que al verla a un servidor le impactó sobre manera, cómo era posible que alguien se atreviera a tanto. Fuimos al perfil de quien hizo ese comentario en FB y de inmediato encontramos la explicación, se trataba de un sujeto homosexual que en su fotografía se mostraba abrazando cariñosamente a otro, es decir alguien desubicado, amargado, desviado y pervertido. Desubicado porque no se puede ubicar en el género en el que nació, nació hombre y se siente mujer, amargado porque la vida de todos los homosexuales es una existencia de amargura, ahí están, por ejemplo, las canciones que compuso algún homosexual y en todas destila amargura, porque, entre otras cosas, no pueden tener una pareja por amor, sólo mediante una paga o hasta que dan con otro tipo igualmente raro. Con sus excepciones claro está, sin excepción no hay regla. Lo de desviado y pervertido no requiere explicación.


Entonces ¿qué se puede esperar de alguien así? Una opinión política no, un argumento menos, una ofensa moderada sería lo menor, sólo le quedó a esta persona el insulto vulgar y múltiple para expresar su amargada molestia contra una candidatura, que alcancé a leer antes de que quien maneja las redes sociales del 7 días borrara ese comentario. Creo que esto se debería hacer con todos los comentarios ofensivos que dejan al pie de las notas que no les gustan a los difamadores y ofensivos. Comentarios en contra de quien sea o de lo que sea sí, tienen derecho a expresar su inconformidad, aunque sea sin argumentos, no pesa pero pasa su comentario; ofensas e insultos no, el derecho de cada quien termina donde empieza el derecho de los demás y todos tenemos derecho a no ser insultados.


En el otro caso, el del licenciado Ramón González, alguien llamado Denuncia Tepa, es decir un anónimo sin valor para dar la cara, publicó que había indicios de que se tambalea su candidatura, de que según fuentes del INE (de risa loca sus fuentes imaginarias) se habían encontrado firmas de apoyo falsas y otras irregularidades. Se trató simplemente de sembrar la duda, de difamar con una mentira, como si eso le fuera a restar votos al candidato a la hora de la elección. Tan inocente fue la publicación que lo único que provocó fue risa y lástima por el coeficiente intelectual de quien lo ideó.


En resumen, parece que los mexicanos no podemos tener elecciones -en ningún nivel-, sin emplear, primero, la descalificación, segundo, la mentira, tercero, la ofensa; es decir, que cada elección es una guerra sucia o una guerra de lodo, a ver quién ensucia más a quién. Qué jodidos estamos los mexicanos, y en este aspecto sí la mayoría, estamos muy lejos de una democracia limpia, decente, de argumentos, de damas y caballeros; somos, o nos comportamos, como todo lo contrario, como patanes, mal educados, bravucones de cantina y además cobardes, porque la mayoría de quienes ofenden e insultan se escudan tras de un pseudónimo.


Y esto no es en defensa ni de Nena de Anda ni de Ramón González, sino una crítica y lamento de lo mal que estamos, o que están, quienes recurren a la ofensa y el insulto como armas de campaña, que a quien más dañan es a quien los profiere, sólo enseña el cobre y se quema como la pobre persona que es.


En resumen, después de ver tantos comentarios positivos en apoyo a la señora Nena de Anda (no había visto ninguno antes en su defensa), y de ver el inicio de la guerra de lodo contra Ramón González (y por supuesto de conocer el resultado de la elección interna del PAN), modifico mi apreciación y creo que la pelea se va a dar entre Ramón González y María Elena de Anda, ya no entre Ramón y Jairo porque éste perdió ante Miguel Ángel Esquivias, de quien no sabemos mucho, o más bien casi nada, excepto que ganó la interna de Acción Nacional. Un diputado nos dijo que Él veía a Ramón en primer lugar, a Nena en segundo, y en tercero a Miguel Ángel, casi coincidimos con su percepción, pero… los seguidores de la señora De Anda apenas están despertando, vaya usted a saber cómo se va a poner esto.


Publicar un comentario

5 Comentarios

  1. Creo que deberías leer tu propio escrito, te lo pongo aquí
    "Entonces ¿qué se puede esperar de alguien así? Una opinión política no, un argumento menos, una ofensa moderada sería lo menor, sólo le quedó a esta persona el insulto vulgar y múltiple para expresar su amargada molestia contra una candidatura, que alcancé a leer antes de que quien maneja las redes sociales del 7 días borrara ese comentario. Creo que esto se debería hacer con todos los comentarios ofensivos que dejan al pie de las notas que no les gustan a los difamadores y ofensivos. Comentarios en contra de quien sea o de lo que sea sí, tienen derecho a expresar su inconformidad, aunque sea sin argumentos, no pesa pero pasa su comentario; ofensas e insultos no, el derecho de cada quien termina donde empieza el derecho de los demás y todos tenemos derecho a no ser insultados."
    -
    Estás ofendiendo a una persona por su orientación sexual cuando en tu "opinión" vuelves patológica su preferencia, el hizo su comentario en sus redes personales, tú por tu parte estás haciendo esto detrás de este supuesto periódico. Tú lo dijiste "todos tenemos derecho a no ser insultados"
    Me parece patético que tomes personal un comentario ofensivo que no va dirigido a ti pero "¿Qué se puede esperar de alguien así?" Ojalá te diera vergüenza ni siquiera tener la capacidad de redactar tu opinión con congruencia.
    Ojalá Dios te bendiga con tantita racionalidad.

    ResponderBorrar
  2. Señor Gustavo, en mi opinión cuando alguien se mete en la política sabe que habra gente en contra y gente a favor y que su calidad moral sera juzgada, y el hecho que usted insulte a alguien por su orientación sexual lo pone en un nivel mas bajo que el supuesto "amargado", iba a decir que usted me desilusiona pero realmente no, usted siempre sera un periodista amarillista, jamas sera un reportero neutro.. después de esto no creo me vuelva interesar leer sus reportajes

    ResponderBorrar
  3. Esta nota no es más que una proyección del autor a sus propios prejuicios, inseguridades y manera de ver el mundo, esto NO es periodismo. En mi opinión este artículo no tiene ningún sustento científico, ni sobre sociología, como dije es una mera proyección del autor que deja ver mucho sobre su situación actual sobre las de los demás, como si fuera un portador de la verdad moral, estamos frente a una falacia argumentativa basada en supuestos del autor sin ninguna base que fundamente dichos supuestos que no olvidemos que fomentan el discurso de odio. Esto evidentemente no es periodismo y es un contenido que no deseo volver a ver, estamos dándole voz a una persona que fomenta discursos de odio en nombre de ustedes como plataforma, es gravísimo y pone en riesgo tanto a ustedes como a la seriedad del periodismo en general. Pensé que estábamos informando, no leyendo TV y notas?, por favor seriedad.

    ResponderBorrar
  4. Que asco de nota... No puedo creer que alguien que se siente periodista escriba algo tan ofensivo, y por otra parte no hay quien supervise que es lo que se publica en 7 días?
    Se nota la falta de profesionalismo

    ResponderBorrar
  5. Buenas noches mi amigo Gustavo. Con respeto, respondo a uno de tus comentarios, que en tu opinión das, acerca de los insultos han hecho al referirse a la señora Nena de Anda. Te quiero decir que, lamento mucho que en una sociedad se ofenda a la gente, incluyendo a la señora, quien también nos a ofendido a los ciudadanos, haciendo referencia que los ciudadanos de ciertos sectores somos unos pobretones. No porque a ella Dios le dio la oportunidad de nacer en cuna de oro, le da derecho a ofender. Ahora, entonces a ella no se le puede ofender, ni reclamar que ofenda a la sociedad? Hago esta reflexión a tu comentario y tampoco estoy de acuerdo en ser sectarios, por las condiciones, pensamientos o preferencias políticas, religiosas o sexuales. Me extraña mi amigo, en verdad leer eso de ti. Saludos.

    ResponderBorrar